Cuando en noviembre del año 2014 el ministro de Asuntos Exteriores español José Manuel García-Margallo visitó Cuba, no consiguió ser recibido por el presidente Raúl Castro, que prefirió evitar la fotografía de un representante español que hacía al mismo tiempo gestos hacia el régimen y hacia la disidencia. Todavía faltaban unos meses para al principio del deshielo entre Cuba y los Estados Unidos y las relaciones hispanocubanas no pasaban por un buen momento.

Es a partir de este contexto que Margallo aparece ahora bien pagado de haber conseguido una imagen con Castro en el marco de la visita oficial que hace en la isla en compañía de Ana Pastor, dos ministros en funciones que evitan dar explicaciones al Congreso precisamente por la interinidad de su cargo, pero que a pesar de todo realizan visitas oficiales.

80 por ciento de la deuda, condonada

Ahora bien, hay que tener bien presente que el encuentro con Castro llega después de la firma, en Madrid, de una serie de acuerdos para regular la deuda de Cuba con el Estado español, que sube a 2.444 millones de euros, de los cuales han sido condonados el 80 por ciento. Según Margallo, la reunión con Castro, además, podría dar pie a una futura visita del rey Felipe o del futuro presidente del Gobierno. "Lo único que nos ha dicho el presidente Castro cuando nos ha enseñado el palacio de la Revolución es el lugar donde saludaría cuando viniera el Rey o el presidente del Gobierno, y a buen entendedor pocas palabras bastan”, ha precisado.

En el marco de la visita, Pastor se ha encontrado con el ministro de Transportes cubano, Adel Yzquierdo, con quien ha llegado a acuerdos sectoriales. Los dos defendieron la importancia de invertir en infraestructuras, tanto para favorecer la movilidad de los cubanos como para atender al turismo.