La CUP pide al Gobierno que investigue y actúe "ante el fascismo de su ejército" a raíz de la entrevista que el colectivo militar Ciudadanos de Uniforme (CDU) concedió en LaMarea. El portavoz de CDU durante la entrevista apuntó actitudes racistas, franquistas y apología a la extrema derecha a la Academia General Básica de Suboficiales de Talarn (Pallars Jussà).

Este colectivo ha elaborado un informe que recoge la creciente presencia y organización de sectores de la extrema derecha en el interior de las Fuerzas Armadas españolas, según la CUP este informe fue remitido en el Ministerio de Defensa. Por estos motivos el partido anticapitalista ha formulado las siguientes cuestiones al Gobierno: ¿"Ha recibido el Gobierno el informe remitido por el colectivo CDU? ¿Está preocupado el Gobierno por el aumento de sectores organizados de extrema derecha dentro de las Fuerzas Armadas? ¿Piensa el Gobierno abrir una investigación para aclarar los hechos que se denuncian? ¿Piensan investigar, en concreto, la presencia del discurso de la ultraderecha a la Academia de Suboficiales de Talarn"?

"Palizas a Mena's y bombardear pateras"

Según la denuncia de CDU, los profesores de la academia de Talarn hablaban "de apalear MENA's, bombardear pateras", hacer apología del franquismo y criticar Unides Podem. Un portavoz del grupo asegura que hay "referencias explícitas al franquismo a las unidades". Una de las más palmarias es que al Tercio Grande Capitán de la Legión exista la I Bandera Comandante Franco: "No creemos que en Alemania exista algún tipo de unidad dedicada a Hitler, ni a Italia dedicada a Mussolini", pero es "una muestra de la anormalidad democrática que existe en España".

"La Transición no llegó al Ejército"

El colectivo en declaraciones en la ACN aseguran que la sociedad "tiene que comprender que para que tengamos un país auténticamente democrático las Fuerzas Armadas tienen que dejar de ser una amenaza para el libre debate político y no dar 'avisos' a catalanes y vascos cuando se plantean según qué cuestiones". Según apuntan, la extrema derecha "no es una anomalía a las Fuerzas Armadas". "Está socialmente normalizada, y eso es posible porque el 1% radicalizado, que son coroneles y generales, son los que están estratégicamente situados en los lugares de poder para evitar que los valores democráticos arraiguen a las Fuerzas Armadas".

También reiteran que "el auténtico problema es que la Transición no llegó al Ejército porque realmente nunca hizo falta. No se vieron obligados a camuflarse como pasó con el franquismo a la sociedad civil".

Imagen principal: Foto de un militar del ejército español. - ACN