Junts per Catalunya ha pedido este jueves una reunión urgente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, después de que en una comparecencia para abordar el caso Santos Cerdán el socialista haya afirmado su firme voluntad de agotar la actual legislatura a pesar de los escándalos de presunta corrupción que lo acorralan. En un breve comunicado, Junts reclama que Sánchez se reúna con el secretario general del partido, Jordi Turull, y la portavoz de la formación en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, con el objetivo de "conocer de manera directa la viabilidad de su "intención" de agotar la legislatura y tomar decisiones en consecuencia". El partido de Carles Puigdemont ha reunido de urgencia la comisión permanente del comité ejecutivo nacional del partido para analizar la situación política desencadenada por la crisis que sacude al PSOE y el efecto sobre el acuerdo de Bruselas que ambas formaciones firmaron. Los juntaires piden la reunión "debido a la gravedad de las informaciones conocidas" y después de haber escuchado las explicaciones de Pedro Sánchez en una rueda de prensa en Ferraz.
Esta declaración, a los pocos minutos de la comparecencia del presidente del Gobierno desde la sede socialista de Ferraz, da la vuelta a la primera reacción que los de Junts han tenido esta mañana. En un primer momento, desde Junts han optado por la prudencia y han reclamado que se respetara la "presunción de inocencia" de Santos Cerdán, uno de los interlocutores del partido en el acuerdo de Bruselas y en las negociaciones de Suiza. Las declaraciones de Pedro Sánchez contra Cerdán han sido tan tajantes ("nunca deberíamos haber confiado en él") que ni siquiera deja margen a la duda ante unos indicios que son extremadamente graves.
Sánchez no piensa convocar elecciones
A medida que han ido pasando las horas, la situación de Cerdán se ha ido agravando. Tras una reunión con Sánchez en la Moncloa, el hasta ahora secretario de organización del PSOE ha presentado su dimisión pese a seguir reclamando que él es totalmente inocente. Inmediatamente después de su dimisión, Sánchez ha convocado a la prensa en Ferraz para pedir perdón a la ciudadanía y anunciar una auditoría independiente sobre las cuentas del partido. En su comparecencia ha dado muestra de poca compasión con la que hasta ahora ha sido su mano derecha y ha asegurado que en ningún caso piensa adelantar las elecciones. Sánchez ha afirmado que tiene pensado agotar la legislatura y continuar en la presidencia hasta 2027.
Por otra parte, ERC ha pedido al PSOE en un comunicado que llegue hasta el final para "hacer limpieza" y también que la auditoría se extienda al Ministerio de Transportes.