Juan Carlos I ha reaccionado después que se haya hecho pública la comisión rogatoria de la Fiscalía del Tribunal Supremo enviada a las autoridades suizas el febrero pasado. La defensa del rey emérito ha denunciado que las imputaciones contenidas en la comunicación del ministerio fiscal y en las que se aprecian "indicios de criminalidad"  se realizan "sin apoyatura alguna y son carentes de la más mínima justificación".

El abogado Javier Sánchez-Junco afirma que tales afirmaciones "conculcan de manera evidente el principio de presunción de inocencia que ampara a todo ciudadano", ya que se traslada a la opinión pública "valoraciones y consideraciones que perjudican gravemente" al anterior jefe del Estado. "En esa comunicación a las autoridades suizas se contienen graves afirmaciones e imputaciones de conductas que se realizan, a nuestro juicio, estando contradichas por otros hechos de los que nada se dice", denuncia.

Comisionista 

La Fiscalía del Tribunal Supremo, en la comisión rogatoria que ha avanzado este viernes El Mundo, apunta que Juan Carlos I amasó su fortuna ejerciendo como comisionista a escala internacional. Según el escrito enviado a Suiza para pedir información acerca de las cuentas del rey emérito, el monarca habría percibido “comisiones y otras prestaciones de similar carácter en virtud de su intermediación en negocios empresariales internacionales”

La  solicitud de información a las autoridades suizas la fiscalía apunta los delitos en los que podría haber incurrido el rey emérito. Se trataría de blanqueo de capitales, contra la Hacienda pública, cohecho y tráfico de influencias. La Fiscalía refleja así por primera vez en un escrito conocido los delitos que investiga.

La información de Suiza

La Fiscalía del Tribunal Supremo ha explicado que son las autoridades suizas deben "confirmar o descartar" los "indicios de criminalidad" contra Juan Carlos I que aprecia en sus diligencias de investigación y que ha incluido en la comisión rogatoria dirigida al país helvético.

El ministerio público, en un breve comunicado, recuerda que tiene abiertas tres diligencias de investigación referidas al rey emérito: una por el cobro de 65 millones de euros por presuntas comisiones de las obras del tren de alta velocidad Medina-La Meca (Arabia Saudí), otra sobre si recibió donaciones no declaradas y una tercera respecto de si ocultó fondos en paraísos fiscales. En paralelo, Hacienda inspecciona las dos regularizaciones fiscales cumplimentadas por Juan Carlos.

 

Imagen principal, el rey emérito Juan Carlos I / Efe