El Instituto Ostrom Catalunya, un think tank independiente catalán, ha elaborado un documento con 50 propuestas para los partidos de cara a las próximas elecciones catalanas previstas para el 14 de febrero. Según informa la entidad, se trata de un documento que se ha enviado a las formaciones y hasta seis partidos ya han incorporado algunos puntos en su programa electoral.

El documento desarrolla recomendaciones de reforma en los ámbitos de la movilidad social, educación y predistribución; investigación, innovación y desarrollo; vivienda; fiscalidad; mercado de trabajo; regulación y competencia; sostenibilidad y transición ecológica; diseño institucional y reforma de la administración; y derechos civiles, ciudadanía y diversidad.

Las propuestas

Una de las propuestas más destacadas del informe es la profesionalización de la alta dirección pública, con el objetivo de "desvincular el funcionamiento de las instituciones del ciclo político-electoral". La reforma afectaría a direcciones y subdirecciones generales y directores de agencias, fundaciones y consorcios, que "pasarían de ser nombrados en dedo, a ser escogido por un proceso abierto y competitivo".

Para impulsar la movilidad social, el Instituto propone implementar un sistema de diagnóstico precoz y apoyo suplementario para los estudiantes con dificultades; dotar los centros escolares de plena autonomía para escoger al personal docente y reforzar los programas de pago por rendimiento (PPR) en el sistema educativo público. También recomiendan introducir un complemento salarial siguiendo a los modelos existentes al Quebec, Reino Unido y País Vasco. Finalmente, proponen revertir la rebaja lineal de los precios universitarios aprobada la pasada legislatura, devolviendo al sistema de tarifación social e invirtiendo los ingresos obtenidos en programas de apoyo a la primera infancia.

Con respecto a la vivienda, el think tank plantea derogar el control de precios del alquiler y facilitar la construcción de nueva vivienda, agilizando la concesión de licencias urbanísticas, destinando suelo dotacional a nuevas promociones y facilitando la conversión de locales comerciales a vivienda, además de incrementar la oferta de alquiler protegido para hacer frente al riesgo de exclusión residencial.

En el ámbito laboral, las recomendaciones incluyen intensificar la educación dual y la participación de las empresas en el sistema de formación profesional; desarrollar herramientas de perfilado estadístico de los parados al Servicio Catalán de Emple (SOC) e introducir nuevos incentivos fiscales al teletrabajo. En el ámbito de la investigación y la innovación, proponen establecer alianzas público-privadas siguiendo al modelo Fraunhofer en Alemania o los Catapults en el Reino Unido e instaurar cheques de innovación que permitan a las empresas contratar investigación a estas instituciones para valorizar el conocimiento de los grupos de investigación.

Otras propuestas regulatorias del Instituto incluyen crear Zonas Francas para la Ecoinnovación que permitan la reutilización industrial de subproductos reciclados; liberalizar el sector del taxi, las farmacias, los horarios comerciales y la regulación urbanística; exigir evaluaciones independientes para proyectos legislativos y reglamentarios de alta incidencia regulatoria; y colaborar con las plataformas con capacidad para recopilar datos para el establecimiento de una normativa dinámica y adaptativa.

Finalmente, en materia de derechos civiles y ciudadanía, el Instituto Ostrom recomienda promover la justicia restaurativa y la mediación penal y comunitaria; luchar contra el perfilado étnico en las actuaciones policiales; crear un circuito integral de acogida de refugiados; agilizar la homologación y convalidación de títulos y estudios de inmigrantes extracomunitarios y reforzar los mecanismos de prevención y actuación contra el acoso de personas LGTBI.

 

Sobre Ostrom

El Instituto Ostrom Catalunya es un think tank independiente nacido en el 2016 por parte de un grupo de miembros de la sociedad civil para introducir el discurso y las propuestas liberales en el país.

Ostrom se define como "un polo independiente y no partidista de conocimiento, debate y generación de ideas, comprometido con el pensamiento profundo y riguroso y con vocación de incidir de manera determinante en la opinión pública y las instituciones catalanas". El objetivo, explican, es promover la participación e influencia en el debate social, un puente entre el mundo académico, la sociedad civil y los gestores públicos para unir esfuerzos con vistas a contribuir al progreso de la sociedad catalana.

En palabras del Presidente del Instituto Ostrom, Eric Herrera, "la pandemia ha puesto de manifiesto las carencias más flagrantes de nuestras instituciones". Según Herrera, las cincuenta propuestas del informe tienen en común que "pueden ser gestionadas y aprobadas desde el Govern de la Generalitat la próxima legislatura". "Nos tenemos que poner a trabajar intensamente para recuperar dinamismo y solvencia, a partir de una interlocución productiva entre la sociedad civil, la academia, los agentes económicos y las instituciones públicas. Reconstruir Catalunya tendría que ser el principal objetivo del nuevo Gobierno elegido en las urnas".