El escándalo por el nombramiento d'Enrique Arnaldo como miembro del Tribunal Constitucional, con los votos del PSOE, PP y Podemos, ha llegado a Alemania. El diario Die Tageszeitung, conocido como TAZ, ha recordado que este futuro magistrado está acusado de "amiguismo, corrupción e influencias en el poder judicial". "El abogado conservador, que entre el 2003 y el 2020 dio conferencias en la fundación del conservador PP, la FAES, nunca se ha tomado muy seriamente el derecho. Mientras trabajaba como abogado del Congreso español, su despacho de abogados trabajaba de forma simultánea para el gobierno autonómico de las Illes Balears. Y no sólo eso. Según las investigaciones, Arnaldo habría ayudado al presidente autonómico, Jaume Matas, condenado por corrupción, a blanquear dinero", afirma.

Decenas de miles de euros habrían acabado en las cuentas del bufet de Arnaldo. Cuando el caso llegó a juicio, los cargos contra Arnaldo habían prescrito", añade citando el diario Público. "Mi papel en el proceso judicial se limitó a hacer una declaración. Y fui exculpado", recuerda el rotativo que dijo el jurista.

TAZ

"No es tan bueno haciendo Justicia", titula el FAZ

 

 

El TAZ recuerda el pasado familiar de Arnaldo. "Divorciado y padre de un hijo, procede de una influyente familia de la capital. Su padre era notario; su tío ocupó altos cargos en los ministerios de Hacienda y de Industria durante los años de la dictadura franquista", explica.

El diario precisa que en total se tienen que cubrir 4 plazas en el Tribunal Constitucional, y que dos de ellas fueron a propuesta de los socialistas, con el apoyo de Podemos. Y otras dos son propuestas por el PP. "Gracias a que los candidatos tienen el apoyo mutuo de los grandes partidos, consiguen llegar a la mayoría necesaria de las tres quintas partes", indica.

 

Diferencia en el PSOE

 

Durante las horas previas a la votación en el Congreso, Odón Elorza ya había advertido que no podía votar por Ernique Arnaldo como nuevo magistrado del Tribunal Constitucional. El diputado del PSOE en el Congreso y exalcalde de San Sebastián durante veinte años argumentaba que no cumplía con los requisitos para ser el perfil idóneo. Y, finalmente, ha sido consecuente con sus palabras. Según ha anunciado a través de su cuenta de Twitter, no ha votado por él. Se suma a dos diputadas de Unidas Podemos, que tampoco lo han votado.

En el mensaje en las redes sociales, Odón Elorza ha explicado que "después de una reunión con la dirección del Grupo Socialista en que he explicado mi posición de cara a la votación, he efectuado con responsabilidad el voto telemático, en el que no he dado apoyo al señor Arnaldo en defensa del prestigio y la dignidad de las instituciones del TC y el Congreso." Pero no será más que un gesto simbólico. Harían falta hasta 36 díscolos para que los nombramientos no salieran adelante. La mayoría necesaria es de 210 y el PSOE, el PP y Unidas Podemos suman 245.

El otro nombre polémico propuesto por el PP es el de Concepción Espejel, aunque la atención mediática se la hayan llevado los escándalos revelados sobre Arnaldo. Hasta ahora era presidenta de la sala penal de la Audiencia Nacional y también tiene varias manchas en su historial. En primer lugar, su relación próxima a María Dolores de Cospedal, que ella niega pero que hizo que en el 2015 se la apartara del juicio de la trama Gürtel. La magistrada desmiente que se la arrinconara por proximidad al PP. La magistrada también destaca por su voto particular a la sentencia que absolvió al major Josep Lluís Trapero y a la cúpula de los Mossos por el 1-O. Espejel los quería condenar.