El Tribunal Supremo juzgará a la diputada de la CUP en el Parlament, Eulàlia Reguant, los próximos 1 y 2 de marzo por desobediencia. Concretamente, la Fiscalía le pide seis meses de prisión e inhabilitación por un delito de desobediencia grave por negarse a responder a Vox durante el juicio del 'procés' en el Tribunal Supremo. El juicio tan solo consistirá en el interrogatorio de la misma diputada anticapitalista y del análisis de los documentos presentados por las partes. Cabe decir que durante el proceso judicial, Reguant podrá responder en catalán. Así pues, el Supremo ha considerado pertinentes las pruebas propuestas tanto por la Fiscalía como por la defensa de la diputada, que incluyen en ambos casos el interrogatorio de la acusada. Con respecto a las cuestiones previas planteadas por la defensa, el auto de admisión de pruebas señala que estas serán respuestas al inicio del juicio de acuerdo con el artículo 786.2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

Poco después de que haya salido la noticia publicada en los medios de comunicación, la diputada anticapitalista ha hecho una atención a la prensa desde el Parlament. Ha explicado que todavía no ha recibido la citación del Supremo y que se ha enterado a través de los periodistas. Desde allí, ha urgido al independentismo a fijar un "horizonte claro" para ejercer de una vez por todas la autodeterminación: "Hasta cuando se aceptará que en el Parlament haya partidos que persiguen el independentismo?", se ha preguntado. También ha explicado que cuando declare en el Supremo denunciará que la extrema derecha actúa con connivencia de los poderes del Estado, y que hay un "hilo conductor" entre el poder judicial y la época franquista. "Es una nueva sentencia que vuelve a poner sobre la mesa que en este Estado es imposible que se garanticen los derechos fundamentales", ha afirmado.

 

El Tribunal Supremo asumió la causa a raíz de la petición que le hizo un juzgado de Madrid que había llevado la instrucción del caso contra ella y contra el ex-diputado Antonio Baños, que también se negó a responder las preguntas del partido de extrema derecha. En abril del año pasado el juzgado número 10 de Madrid se declaró competente y abrió juicio oral contra Reguant y Baños y este pasado otoño pidió en el Supremo que asumiera la causa contra Reguant. Respecto al caso que concierne el exdiputado de la CUP, Antonio Baños, su caso resta, de momento, en el juzgado de instrucción de Madrid, donde también hay abierto un juicio oral.

La respuesta de Reguant

La diputada de la CUP, Eulàlia Reguant, quiere utilizar la ofensiva judicial como "boomerang" contra el Estado español. El partido de extrema derecha que encabeza Santiago Abascal se personó como acusación popular contra los dirigentes independentistas por la organización del referéndum del 1-O. Ante las preguntas del partido ultraderechista, Reguant se negó a responder por "dignidad democrática y antifascista". Además, durante el juicio, la diputada anticapitalista definió Vox como un partido "de extrema derecha, machista y xenófobo". Este hecho provocó que los tribunales españoles le abrieran una causa por un presunto delito de desobediencia en que la Fiscalía pide seis meses de inhabilitación y seis de prisión.

A raíz de la ofensiva judicial contra la parlamentaria cupaire, se ha creado un grupo de apoyo a Reguant llamado 'Ferma contra el Feixisme'. En este sentido, recientemente, en un acto organizado por este movimiento anti-represivo, Reguant agradeció que se hayan movilizado para "utilizar de punta de lanza un proceso judicial que ejemplariza qué es la justicia en el Estado español y como la extrema derecha utiliza todas las herramientas que el Estado le ha puesto al alcance para tener más presencia por todas partes". "La desobediencia es la mejor herramienta para plantar cara a los poderes que nos quieren en los márgenes", afirmó a la diputada.

Los sindicatos dan apoyo a Reguant

Un conjunto de 19 sindicatos de izquierdas de todo el estado español dan apoyo a la diputada CUP Eulàlia Reguant y al exdiputado Antonio Baños por su causa contra Vox. Aunque Baños y Reguant ya recibieron una multa, ahora Reguant tendrá que afrontar un juicio oral en el Tribunal Supremo por supuesta "desobediencia grave", la Fiscalía pide para ella seis meses de inhabilitación y seis de prisión. En este contexto, los sindicatos han hecho público un comunicado donde muestran su solidaridad y denuncian "el blanqueo del fascismo por parte de la judicatura del Estado", y este nuevo ataque a la soberanía nacional de Catalunya "que intenta trampear la voluntad popular expresada por el pueblo de Catalunya en las urnas".

En el documento, los sindicatos se muestran preocupados por como, cada vez en más países, están apareciendo y se están consolidando fenómenos de extrema derecha. Para ejemplarizarlo, mencionan Bolsonaro en Brasil o Marine Le Pen en Francia: "En este contexto están aumentando los ataques fascistas contra las mujeres y movimiento feminista, la comunidad LGTBI, organizaciones independentistas y de izquierdas," denuncian.

Los sindicatos que firman el manifiesto son: Confederación Intersindical Galega, Confederació Intersindical Central Unitaria de Traballadoras de Galiza, Colectivo Unitario de Trabajadoras y Trabajadores Aragón, Corriente Sindical d’izquierdas Asturies, ESK Euskal Herria, Intersindical Alternativa de Catalunya, Intersindical Canaria, Intersindical de Catalunya, Intersindical Valenciana, LAB Sindikatua Euskal Herria, Sindicato Andaluz de Trabajadores y Trabajadoras, Sindicato Asambleario de Sanidad, Sendicato d’os Treballadors e Treballadoras d’Aragon-Sindicato Obrero Aragones, Sindicato 25 de Marzo Extremadura, Sindicato Asambleario de Sanidad, Solidaridad Obrera, STEI Balears i STEILAS Euskal Herria.