ERC, CUP y Podem han conmemorado esta noche en Sant Boi de Llobregat la manifestación de la Diada de 76, la primera que se celebró de forma consentida después de la muerte de Franco. En el acto, las tres formaciones han defendido el derecho a decidir, si bien Podem se ha distanciado de la unilateralidad. Por otra parte, la CUP ha querido dejar claro que por parte de este partido "no tenemos en el horizonte" el tripartito de izquierdas.
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La plaça de Catalunya de Sant Boi se ha llenado con 1.500 personas que se han reunido en acto organizado por la izquierda, donde no ha sido invitado el PDC, para conmemorar la primera manifestación permitida en pro del autogobierno de Catalunya y de la democracia, que tuvo lugar el 11 de septiembre de 1976.
En un entorno donde han predominado las esteladas y los gritos de independencia, el acto se ha iniciado precisamente con la presencia de un activista espontáneo, bajo el escenario, que llevaba la pancarta que proclamaba "Menos banderas, más derechos."
Acabo de reventar el acto #SantBoi76 pidiendo a @OriolJonqueres derechos para sin techo y la policía me ha echado... pic.twitter.com/VK2qXhKJgT
— Lagarder Activista (@lagarder81) 9 de setembre de 2016
En el acto, en el que han participado Oriol Junqueras (ERC), Anna Gabriel (CUP) y Albano Dante Fachin (Podem), el acuerdo en el derecho a decidir no ha escondido las diferencias respecto a cómo llevarlo a cabo. Mientras que Junqueras ha afirmado que "no pediremos permiso para decidir nuestro futuro", y Gabriel ha afirmado que "la ruptura se llama referéndum vinculante" ante un Estado que "niega y negará el derecho a la autodeterminación", Fachin ha llamado a tejer alianzas con el resto del Estado, y ha sentenciado que el derecho a decidir no tiene que ser preso de una hoja de ruta, que, asegura, "parece que quiera perpetuar a algunos en el poder, más que buscar la soberanía real".
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Tripartito de izquierdas
En referencia al tripartit de izquierdas entre ERC, CUP y comunes, que algunos especulan que puede llegar a Catalunya en las próximas elecciones, sólo Gabriel ha querido pronunciarse al respecto, para dejar claro que "no tenemos al horizonte ningún tripartito", y ha reiterado su defensa del referéndum, que considera la herramienta "más democrática".
La negativa de Gabriel ante el tripartit de izquierdas, ha llegado después del llamamiento a la unidad de la izquierda del secretario general de la UGT, Camil Ros, que ha afirmado que entre los presentes en la manifestación "hay más cosas que nos unen, que no que nos separan". En este sentido, tanto Ros, como el líder de CCOO, Joan Carles Gallego, han hecho una contundente defensa del derecho a decidir, además de pedir que la lucha social y nacional vayan de la mano.
Sin permiso
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha querido recordar las luchas de aquella época, en la que "lugares como Santa Coloma de Gramenet o Sant Vicenç dels Horts", con población mayoritaria del resto de España, impulsaron la inmersión lingüística, para declarar que ahora "estamos en otro momento histórico" y que "nunca pediremos permiso para decidir nuestro futuro", en una clara defensa de la unilateralidad.
En este sentido, Junqueras, de la misma manera que Gabriel, ha criticado la reforma y la no ruptura que significó la transición, para acabar su discurso instando a seguir luchando "hasta la victoria, siempre".
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Por parte de Podem, Fachin, que no ha mostrado épica independentista como sí lo han hecho Junqueras y Gabriel, se ha limitado a defender el derecho a decidir y el proceso constituyente, "que se tiene que hacer sin atajos y con valentía", pero evidenciando, él mismo, la distancia de su partido en este aspecto con ERC y CUP. Así, ha matizado que "mejor compartir las diferencias, que esconderlas", ya que el futuro "lo decidiremos juntos".
No abusar de la paciencia
Uno de los organizadores del acto del año 76, Miquel Sellarès, que ha sido entrevistado por El Nacional esta semana, ha aprovechado la frase que pronunció el desparecido Jordi Carbonell ('Que la prudencia no nos haga traidores') en aquella manifestación, para pedir a los "dirigentes jóvenes" que "la prudencia no nos haga esperar 40 años más", en clara referencia a los comunes, "porque ya se ha visto que el Estado no cambiará".
También ha hecho referencia a la frase de Carbonell la diputada de la CUP Anna Gabriel, en este caso para modificarla, y asegurar, según ella, que sí, que "la prudencia hizo que algunos fueran traidores".
El acto ha concluido con un canto común de L'Estaca, de Lluís Llach, en que se ha visto a Junqueras, Gabriel y Fachin juntos, tras una estelada roja.