El arzobispo de Barcelona, Joan Josep Omella, estaba citado este viernes por la mañana por segunda vez en la comisión de investigación del Parlament de Catalunya sobre la pederastia en la Iglesia. De nuevo, el presidente de la Conferencia Episcopal Española ha declinado asistir, hecho que le ha comportado críticas desde Esquerra Republicana, Junts per Catalunya, la CUP y los comunes. Dado que se trata de la segunda incomparecencia —la primera se produjo el lunes y se lo volvió a citar este viernes—, la presidenta de la comisión de investigación, Susanna Segovia (comunes), ha planteado informar de todo ello a la Mesa del Parlament para que esta lo denuncie a la Fiscalía.

Durante la exposición de esta propuesta, Segovia ha recordado que el reglamento de la cámara catalana contempla en el artículo 68.3 la posibilidad de llevar estos casos al Ministerio Fiscal. En concreto, el texto expone que "si la persona convocada desatiende, voluntariamente, el requerimiento de comparecer ante una comisión de investigación, la Mesa del Parlament tiene que dar cuenta al Ministerio Fiscal, a los efectos de sustanciar la responsabilidad penal que pueda corresponder". Al mismo tiempo, en las notificaciones iniciales que reciben los comparecientes, se les tiene que advertir de esta "posible responsabilidad penal". Esta denuncia no se circunscribe al caso del arzobispo Omella, sino que también se quiere seguir el mismo procedimiento ante las dos ausencias que también han protagonizado el vicesecretario de la Conferencia Episcopal Tarraconense, Enric Termes, y el presidente del Tribunal Eclesiástico de Barcelona, Santiago Bueno.

Los otros tres diputados asistentes a la comisión de investigación de este viernes han manifestado su apoyo para que se haga este traslado de incomparecencias a la Fiscalía. Desde Esquerra Republicana, José Rodríguez ha criticado que "se haya faltado el respeto a la soberanía del pueblo catalán, al Parlament". A su vez, Francesc Ten (Junts) ha indicado que "cualquier persona con cargo de una institución implicada en los casos que se estudian no puede dejar de perder la oportunidad de pedir perdón, porque su cargo es bastante relevante e importante para estar aquí". "Eso es lo que esperaría la sociedad y los feligreses", ha añadido.

Ahora, será la Mesa quien tendrá que tomar la decisión de trasladar las incomparecencias al Ministerio Fiscal. Aunque en este caso presumiblemente no tendrá ninguna implicación, la configuración de las mayorías del órgano rector de la cámara catalana ha cambiado con las bajas de Aurora Madaula y Ruben Wagensberg. Ahora, el PSC es quien tiene más miembros —Assumpta Escarp y Ferran Pedret—, mientras que Esquerra (Alba Vergés) y Junts (Anna Erra) se han quedado con un único miembro, como tiene la CUP (Carles Riera).

La carta de Joan Josep Omella a Anna Erra

El jueves de la semana pasada, el arzobispo de Barcelona envió una carta a la presidenta del Parlament, Anna Erra, para comunicarle la decisión de no comparecer el lunes en el Parlament, motivaciones que se han reiterado para hacer lo mismo este viernes. En esta misiva, Joan Josep Omella explicaba que los obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense habían decidido "de forma unánime y expresa" que no compareciera en la cámara catalana. En el texto, el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) recordaba que el Congreso ya encargó al Defensor del Pueblo la creación de una comisión independiente para elaborar un informe en torno a las denuncias por abusos sexuales en el ámbito de la Iglesia, que se presentó en octubre de 2023 y que contó con "la colaboración de las diócesis, los institutos religiosos y sociedades de vida apostólica, y la misma CEE". También destacaba que el órgano que preside había encargado una auditoría independiente sobre los casos de abusos sexuales, que se entregó a la institución en diciembre del año pasado.