El independentismo volvería a obtener la mayoría absoluta si hubiera elecciones en el Parlament, según ha señalado el último barómetro Ómnibus del Centro de Estudios de Opinión (CEO). De hecho, las opciones independentistas podrían crecer: pasarían de los 70 escaños actuales a una horquilla de entre 69 y 74 diputados. El triunfo de las fuerzas independentistas se labraría gracias a una subida de las fuerzas de izquierda, ERC y la CUP, y una bajada de Junts per Catalunya, que en un giro inesperado quedaría por detrás de los republicanos.

El vicepresident Oriol Junqueras quedaría reforzado en la pugna en el flanco independentista: los republicanos pasarían de 32 a entre 33 y 35 escaños, lo que les podría dejar a tocar de la victoria. ERC compartiría el primer lugar con Ciutadans (33-35), que a su vez se dejaría por el camino entre uno y tres escaños. Junts per Catalunya pasaría al tercer puesto, con entre 29 y 31 escaños, lejos de los 34 obtenidos el 21-D. Todo en un contexto en que caería la participación, que se quedaría en un 68% del electorado.

La subida que más sorprende es la de la CUP, que ahora conseguiría entre 7 y 8 escaños, el doble de sus diputados actuales, algo que les acercaría a su mejor resultado: los 10 encaños del 27-S. Por encima de los cupaires se situarían los socialistas (15-16 escaños) y los comuns, que se quedarían otra vez con los mismos ocho conseguidos el 21-D. En último lugar, con un resultado aún peor que el de los últimos comicios, el PP de Xavier García Albiol podría quedarse solo con 3-4 escaños.

Así, la Cámara catalana seguiría teniendo mayoría independentista, que sitúa entre los 69 y los 74 escaños. con ERC, JxCat y la CUP. El bloque constitucionalista quedaría entre 51 y 56 escaños, sin contar los 8 diputados de Catalunya en Comú-Podem, que quedarían al marge los dos bloques.