Los concejales de ERC y la CUP de Mataró han denunciado esta mañana que no han podido entrar en el Ayuntamiento porque se han encontrado la puerta cerrada. Estos dos partidos querían trabajar voluntariamente hoy, en señal de rechazo a la Constitución española, pero, como ellos mismos han denunciado por Twitter, no lo podrán hacer porque no se les ha dejado entrar en las instalaciones.

La concejala de ERC Mataró Anna Salicrú ha explicado en Catalunya Radio, sin embargo, que no ha habido ningún enfrentamiento en el Ayuntamiento. "Sencillamente no los dejan entrar", ha asegurado, explicando también que trabajarán hoy igualmente fuera de las instalaciones.

Por otra parte, un concejal de la CUP ha explicado a la misma emisora que cuando han visto la puerta cerrada, han llamado a la policía local y les han infromado de que "había órdenes de que estuviera cerrado" y, por lo tanto, que no podían acceder al consistorio. El cupaire ha explicado que el alcalde sabía que los concejales acudirían a sus lugares de trabajo, y ha denunciado que no se las ha respetado su decisión ni su libertad.

El ayuntamiento de Mataró está gobernado por David Bote, del PSC. Bote llegó al gobierno en junio del 2015 después de un pacto de gobernabilidad con el PDECat.

Sin embargo, los concejales republicanos han aprovechado el día para leer un manifiesto ante el Ayuntamiento explicando el porqué de su rechazo a la Carta Magna. Según los concejales, no se sienten cómodos conmemorando "una Constitución española que tenía que garantizar los derechos fundamentales de la ciudadanía", pero que "se utiliza contra Catalunya". También denuncian una utilización política y no jurídica del texto.