El Gobierno español ha calificado de "injustos y mezquinos" los desplantes al rey Felipe VI anunciados por el presidente del Parlament, Roger Torrent, y por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en la inauguración del Mobile World Congress (MWC), y ha advertido que ponen en riesgo que Barcelona "pueda seguir acogiendo en el futuro un acontecimiento global de tanta importancia". Así lo han indicado fuentes del Ejecutivo, que han subrayado que el Gobierno deplora la actitud "irresponsable y sectaria" de estos representantes públicos catalanes.

El ejecutivo español con el monarca

El Gobierno ha afirmado que acompañará al monarca durante su estancia en Barcelona con motivo de este acontecimiento internacional. "La presencia del Rey en Barcelona simboliza el apoyo de la Corona y del conjunto de España al MWC, y por extensión, al desarrollo de la economía catalana", sostienen las mismas fuentes. El Ejecutivo avisa de que Barcelona "se juega mucho estos días" porque "todos los ojos estarán puestos" en el MWC, un acontecimiento en el cual cargos institucionales catalanes y del gobierno español "tendrían que estar unidos y trabajando juntos". "El MWC deja un importante impacto tecnológico y de generación de nuevos proyectos de negocio en Barcelona, Catalunya y en toda España que tenemos que apoyar e impulsar desde todas las instituciones", concluye el ejecutivo español.