La criptomoneda de referencia ha salido viva una vez más cuando especialistas ya la daban por finiquitada después de ocho semanas de pérdidas. Su reaparición tuvo lugar de madrugada el martes en Nueva York al intercambiarse a 30.687 dólares, Multitudes respiraron por fin de una larga pesadilla dentro de una situación muy negra de la economía global. La noticia de que en Shanghái la Covid retrocedía empujó al retorno de la normalidad. Lejos de Asia, el aumento de los tipos de interés en una buena parte del mundo ha forzado una venta masiva de activos de riesgo, que está costando superar. 

El cuasi-crack de las criptomonedas va a sanear el sector, dicen sus protagonistas. "Nosotros asistimos a una fase de racionalización del mercado, donde muchos proyectos que no eran sólidos mueren y vamos hacia una fase de maduración sobre infraestructuras y servicios", dijo Claire Balva, directora de blockchain y criptos en KPMG. El universo de los criptoactivos es muy joven en la escala de innovaciones, al tiempo que la demanda se concentra entre los hogares de ingresos altos y bajos.  Por todo ello, el Banco Central Europeo (BCE) es muy prudente. "Aunque los riesgos son actualmente pequeños, podrían aumentar de manera significativa si las plataformas comenzaran a ofrecer servicios a la economía real, en lugar de permanecer dentro del universo criptográfico". 

El desarrollo del futuro permitirá un desarrollo más sólido. El cambio es siempre muy laborioso, y con sustos por el camino

Pero, todo, poco a poco. Sam Bankman, un actor mayor del sector, dijo el 16 de mayo al Financial Times que la tecnología de fondo del blockhain no se convertiría en una red de pago. Por su parte, David Marcus, antiguo arquitecto, se dedica a impulsar los pagos instantáneos y reducir los gastos de las comisiones. "Este período de mercado es una excelente ocasión para construir la infraestructura que necesitamos". El desarrollo del futuro permitirá un desarrollo más sólido. El cambio es siempre muy laborioso, y con sustos por el camino. El bitcoin podría, ciertamente, ser uno de los símbolos de la audacia y la paciencia. Y por esa vía en Asia está encontrando el futuro. El mayor banco de inversión de Japón, el Nomura, planea, según ha explicado, establecer una filial de criptomonedas. Contratará un centenar de empleos para trabajar en el capítulo de los activos digitales.

El Financial Times informó el martes que Nomura reunirá servicios de criptomonedas bajo una sola empresa para 2023. El balance en el primer trimestre de Nomura refleja 569.000 millones de dólares en activos bajo gestión. Un ejecutivo del banco japonés dijo al Financial Times que "si no hacemos esto, va a ser más difícil ser competitivos más adelante". Y, a su vez, la marca de los 30.000 dólares está demostrando ser un obstáculo para el bitcoin una vez más. El viernes arrancó en 27.922,69 dólares ante el temor de un "huracán" económico que afecta a los activos de riesgo.