¿Verdad que era aquí (en Catalunya) donde las familias pasan la Navidad bajo un puente (cada miembro bajo el suyo y de forma individual) porque esta sociedad absolutamente fracturada en la que vivimos (y bla, bla, bla) provocaba que fuera imposible compartir ni una carn d'olla? ¿Era eso y era así, verdad?

Pues, por desgracia, ahora resulta que eso también sucede si un "español muy español" tiene un pariente de Teruel. La fractura se extiende como el mosquito tigre, la mosca negra y el caracol manzana y ahora Teruel es ETA. Adolfo Suárez júnior se gira de espalda cuando habla EH Bildu, como si estuviera en la clase de los delfines, y la ultraderecha y alrededores han decidido que el movimiento Teruel Existe es ETA. ¿Por qué? Bien, es que se ve que existe para dar apoyo a un gobierno del cual la ultraderecha no es muy partidaria. Y ya se sabe que cuando la ultraderecha decide que tú eres ETA, tú pasas a ser un proscrito social que sólo tendrá problemas. Y no menores.

Cuando tú pasas a ser ETA, sus medios de comunicación empiezan a publicar "reportajes" sobre ti donde, o bien te insultan, o bien te difaman, o bien se inventan las barbaridades más salvajes, o bien hacen las tres cosas a la vez. También a partir de aquel momento empiezan a aparecer de manera mágica informes sobre irregularidades diversas y, si hace falta, cuentas falsas en el extranjero, amantes explicando historias para no dormir, falsos conocidos y saludados suponiendo cosas y especulando barbaridades y un antiguo compañero de escuela asegurando que una vez copiaste en un examen de química.

España, aquel gran ejemplo de convivencia frente una Catalunya donde es imposible vivir si no eres un lazi, se ha despertado en plena Navidad, la fiesta llena de paz y amor, insultándose, despreciándose y humillándose. Y con unas maneras que significarían la expulsión inmediata y a patadas en la cabeza del local más sórdido del barrio más marginal de la ciudad más decrepita de la sociedad más salvaje.

Esta España modélica a la cual tenían que huir hasta no hace mucho los millones de catalanes no indepes que eran expulsados de Catalunya por disidentes, ha tenido que poner escolta a Tomás Guirarte, diputado de Teruel Existe. ¿Por qué? Pues porque este señor ha recibido cerca de 9 mil correos electrónicos amenazándolo e insultándolo. Y en la España modélica y llena de armonía, el señor Guirarte ha tenido que dormir en paradero desconocido y protegido para evitar que alguien pudiera cumplir las amenazas.

Es esta España ultra, minoritaria pero que controla el timón de la nave y que se ha inventado una realidad sobre Catalunya, la que ahora muestra al mundo la cara que nosotros ya nos sabemos de memoria desde hace tiempo. Es la cara de los que este martes, cuando la mayoría del Congreso de los Diputados ha aplaudido a la diputada de los Comunes Aina Vidal que sufre un cáncer, no se han dignado ni a hacer el gesto humano de sumarse. 

El reto de Sánchez y su gobierno de coalición es intentar vertebrar una resistencia de autodefensa política y social que combata el gobierno de Vichy. Básicamente porque si no se defienden, ellos (y ellas) serán los siguientes en ser ETA.