Acto del PP en BCN. En el hotel Claris. Reunión de la vicepresidenta de España y un poquito presidenta de Catalunya con el gremio de restauradores, de comerciantes y con representantes del sector turístico. Reunión a puerta cerrada, por cierto. ¿Tema? Los efectos del atentado de agosto y, sobre todo, cómo afecta el procés a la "marca Barcelona".
La convocatoria era a las 4 y media. La rueda de prensa ha sido a las 19.22. En este espacio de tiempo ha sucedido esto:
Pues sí, hemos estado esperando casi tres horas a que acabara un encuentro donde nos han dicho que todo el mundo ha tomado la palabra y para poder asistir a una rueda de prensa posterior que se ha terminado con dos preguntas sobre la reunión, una sobre actualidad y pare usted de contar. Eso sí, con mucha simpatía. Soraya Sáenz de Santamaría ha entrado muy sonriente en la sala donde estábamos. Nos ha preguntado, con una gran simpatía, si no teníamos frío (una hora y media antes una periodista ya se había quejado de la temperatura existente al lugar). Ha hecho una broma con su altura y la de Xavier García Albiol, también presente tanto en la reunión como en la rueda de prensa: "Es que apunto poco en general. Pero en este caso, aún menos", ha resumido sobre la diferencia existente. Ha seguido sonriendo y nos ha dicho que hay que relanzar la marca BCN. ¿Ah, que está mal? Sí, el procés la ha perjudicado y es justo trabajar para recuperar lo que siempre había sido. Porque el procés ha provocado unos efectos muy negativos. "Las cifras del paro son más negativas en Catalunya que en España" y "Este puente han bajado las reservas, en algunos casos hasta el 30%". ¿Solución? "Recuperar la confianza y consolidar el clima de tranquilidad que ha aportado el 155". ¿Qué medidas se han puesto en marcha? "Bien, estamos hablando con los diferentes agentes de cara a recuperar la confianza". En resumen, que la clave es la confianza.
¿Y, después de las elecciones habrá más 155, como ha insinuado Rajoy? "Bien, el mal ya está hecho, pero la situación todavía se puede revertir. El gobierno que salga tiene que recuperar la tranquilidad y la confianza. Y quien ame Catalunya tiene que ser consciente de que si se continúa en la ilegalidad, el daño sería terrible". Como diciendo, ¿sabe? Pero todo, eso sí, con una gran sonrisa.
Total, que en Catalunya todo está en orden, las cosas no van bien pero pronto se corregirá la cosa y nada, que toca sonreír mucho.
Por cierto, el mismo día en que es noticia Sijena y este interés repentino de la sociedad en general por el arte y por los museos, le explicaré una curiosidad relacionada con este mundo. El hotel Claris es propiedad de Jordi Clos, presidente del gremio de hoteleros, pero sobre todo uno de los grandes expertos en arte egipcio de Europa. Y también un gran mecenas. Si tiene tiempo, vaya al museo egipcio de BCN, que es obra suya. Pues bien, en la entrada de la pequeña sala donde se ha realizado la rueda de prensa, había una especie de vitrina con una pieza. Era una figura humana de tamaño natural, de madera policromada y que en la zona frontal de las piernas era como si se hubiera actuado la carcoma. Pues bien, con Roberto, el cámara gracias al cual usted ve los vídeos, estábamos allí comentando cuál podía ser el origen de la pieza. Egipcia, no. Imposible. Tenía un aire oriental, pero la posición de las manos y el policromato nos planteaban dudas. De repente ha aparecido un miembro de seguridad de Moncloa, concretamente el que nos había acreditado y nos había controlado las pertenencias y el que después nos ha impedido acercarnos a la vicepresidenta, y se ha añadido a la especulación. Ha dicho que hacía poco había estado por el sureste asiático y que podría ser vietnamita. Ha empezado a buscar fotos por el móvil y nos hemos puesto a comparar piezas. La forma de las orejas era muy parecida, pero no. Hasta que no he podido más y he subido a recepción a preguntar. La recepcionista ha hecho una consulta telefónica y nos ha ofrecido la solución: es Indonesia. Cuando se lo he comunicado al señor Moncloa me ha dicho: "no íbamos tan desencaminados".
Total, que en esta Catalunya donde el 155 ha restablecido la orden y la paz, el mismo día en que la Guardia Civil se lleva las piezas de Sijena, un miembro de seguridad de Moncloa acaba hablando de arte con dos periodistas que matan el tiempo como pueden. ¿Lo ve como estamos en el país de las maravillas? Es que nos quejamos por vicio...