No había sucedido nunca. Y este domingo lo hemos visto por primera vez. En España han suspendido un partido de fútbol profesional por culpa de los gritos contra un jugador.

Pasó el domingo durante el enfrentamiento de la liga de segunda división entre el Rayo Vallecano y el Albacete. Parte del público estuvo llamándole "puto nazi" a Roman Zozulia, jugador ucraniano del equipo manchego, hasta que el árbitro pidió que desde megafonía se advirtiera que si continuaba aquella actitud, el partido se acababa allí mismo. Y como la actitud continuó, el partido se acabó allí mismo. Y a partir de aquí algunas consideraciones para entender qué pasó.

Primera cuestión: ¿el señor Zozulia defiende el nazismo? ¿Es decir, realmente es un puto nazi? Bueno, él dice que no lo es y se autodefine como un patriota ucraniano. Por lo que sabemos, fundó el grupo paramilitar de ultraderecha Narodna Armiya (Ejército del Pueblo) y ayudó al gobierno de su país a combatir contra los rusos. Los que lo acusan de ser un nazi han hecho correr una foto que lo persigue. Esta:

foto nazi

Para los pocos habituados a la simbología nazi, esta imagen sería el inocente recuerdo de un día en que el señor Zozulia jugó un simpático partido de baloncesto en el pabellón de su pueblo. Pero los más familiarizados con el lenguaje que usan estos grupos sabrán que el número 18 de la camiseta quiere decir "Adolf Hitler" y viene por la posición de las iniciales en el abecedario. La a está en el primer lugar y es el 1. La letra h está en el lugar 8. Vamos ahora al marcador. El 14 son las 14 palabras pronunciadas por David Lane, ideólogo y líder supremacista norteamericano (1938-2007). Y el 88 quiere decir "Heil Hitler" y proviene nuevamente de la posición del octavo lugar de la letra h.

Por lo tanto, desconocemos el grado de nazismo del señor Zozulia, pero haciéndose una foto como esta digamos que está más cerca de serlo que de no serlo.

Segunda cuestión: ¿pero sólo con la foto, podemos concluir que este señor es nazi? Cuando ayer un servidor de usted conoció la noticia, empezó a buscar. Y encontré medios de comunicación que decían que este señor era muy nazi, otros decían que no y otros que ni sí ni no. Entre estos últimos, una pieza publicada el 6 de febrero del 2017 por Carlos Torralba en el diario El País y titulada “Así influyó la propaganda rusa en el veto a Zozulia. El fichaje del delantero por el Rayo se frustró sin pruebas fehacientes de que tenga vínculos neonazis” y donde se podían leer estos dos fragmentos:

País1

País2

Tercera cuestión: ¿la Liga ha vivido otros momentos donde los insultos del público habrían justificado suspender el partido? Centenares. Me quedo con dos.

1/ 30 de abril del 2014. La policía detiene al individuo que dos días antes había lanzado un plátano a Dani Alves, entonces jugador del Barça. Fue durante el partido que los blaugrana jugaban en Villarreal. Hombre, si detienes a alguien por decirle mono a un jugador negro del equipo rival, con más motivo tienes que detener el partido, ¿no?

2/ Febrero de 1992. El entonces entrenador del Valencia, Guus Hiddink, está dirigiendo los ejercicios de calentamiento de sus jugadores previos al partido que su equipo tiene que disputar en Mestalla contra el Albacete y ve que en una valla ocupada por una peña rival hay una bandera nazi. Visiblemente irritado, exige a un empleado que la retire. Cuando el presidente valencianista, Arturo Tuzón, fue preguntado por el caso respondió: “¿Cómo puede estar pendiente el preparador de lo que sucede en las gradas? Su trabajo está sobre el césped. Me parece una tontería”. Ni partido suspendido, ni sanción para el Albacete y todavía menos para Tuzón.

Por lo tanto, sorprende que ahora haya pasado eso con unos gritos de nazi a un jugador que muy probablemente lo es. Pero, claro, el presidente de La Lliga es Javier Tebas, antiguo dirigente de Fuerza Nueva, simpatizante del grupo neonazi Hogar Social y votante de Vox. Y claro, Zozulia no es un catalán de estos que todo el puto día tiene que oír como unos cuantos de estos que se creen muy simpáticos y llenos de ingenio le van diciendo "lazi", o sea, nazi. Por poner lazos amarillos. Blanco y en botella, a ver si será horchata...