Sea en un vuelo o en un tren, cuando la megafonía dice que los pasajeros no se levanten del asiento hasta que el aparato en cuestión se haya detenido, ¿exactamente qué es lo que no se entiende? Cuando la megafonía dice que los pasajeros irán saliendo por filas de cinco en cinco, ¿qué es lo que no se entiende? Después de unas horas de vuelo, ¿viene de unos minutos levantarse del asiento? ¿Por qué hay gente que cree que el resto de pasajeros son idiotas y ellos unos privilegiados que tienen derecho a salir antes que nadie de esas latas de conserva? De hecho, ¿qué sentido tiene que la gente se amontone en la puerta de embarque si el avión no saldrá hasta que suba el último pasajero y el asiento está reservado? ¿Por qué se produce ese fenómeno que lo único que hace es generar caos y retrasarlo todo? ¿No hay remedio para esta absurdidad?
Pues se ve que sí que hay remedio. Pero, como el de los implantes capilares, tenemos que ir a buscarlo a Turquía. A partir de ahora, los pasajeros —entiendo que, de momento, solo los Turkish Airlines— que se levanten del asiento antes de que el avión haya terminado de circular por la pista o que se agolpen en el pasillo antes de que sea el turno de su fila para desembarcar, serán multados, gracias —en este caso, gracias— a una medida aprobada con la complicidad de la compañía. El objetivo es "disciplinar y aumentar la concienciación de los pasajeros".
De modo que los usuarios que no "respeten la prioridad de desembarco de los pasajeros serán reportados a la autoridad y se impondrá una multa administrativa". Esto incluye desabrocharse el cinturón de seguridad antes de tiempo, levantarse antes de tiempo, abrir los compartimentos superiores antes de tiempo o amontonarse en el pasillo antes de tiempo. La penalización será de 2.603 liras turcas. 67 dólares. 60 euros. Ignoro —entiendo que no— si acumulables.
El argumento es el riesgo, pero básicamente se trata de educación
Según las autoridades turcas, con estos comportamientos de rebaño se pone en riesgo "la seguridad de los pasajeros y del equipaje" y no se respeta "la satisfacción y prioridad de salida" de otros pasajeros. El argumento es el riesgo, pero básicamente se trata de educación. Y leo con satisfacción que otras aerolíneas están considerando implementar regulaciones similares, entre ellas Emirates y Qatar Airways.
Los expertos defienden que los pasajeros deben esperar a que las filas delante de él salgan antes de ocupar el pasillo, obviamente con la excepción de permitir —¡y facilitar!— el paso a los pasajeros que tienen conexiones muy justas. Además, si se trata de ponerse de pie y estirar las piernas una vez que se apaga la señal de cinturón de seguridad, no hay ningún problema en hacerlo en tu asiento. Eso sí, bajando un poco la cabeza, porque de pie lo que es de pie, no cabes. Pero esta es otra historia.
En fin, lo que se pide no es demasiado complicado. No hace falta ni preguntar “quién es el último” como en la panadería o la pescadería. ¿Usted está en la última fila? Pues usted es el último. Y, por ese orden, se hace una fila india, aquella que inventaron con orden y jerarquía los indígenas americanos. Y el último que salga, no hace falta ni que borre las huellas. No le perseguirá ningún rostro pálido.