ManelFontdelvila

1. Esta viñeta de @ManelFontdevila fue publicada ayer en el @DiariAra. El día anterior, @quimbertomeu había publicado una pieza, complemento de la crónica del acto de Perpiñán de los 3 expresidentes que apuntaba en la misma dirección: «Perpiñán, cuna del PDE», el partido de los expresidentes, por lo menos 2 del entorno de @JuntsXCat.

2. La hermenéutica es la ciencia clásica de interpretación de los textos, antiguamente sagrados. Hay que ser muy generoso para no interpretar la viñeta y el artículo como un desprecio al acto de Perpiñán. El medio que los publica es hoy uno de los arietes periodísticos de la nueva sociovergencia republicana contra @JuntsXCat.

3. La competencia entre @JuntsXCat y @Esquerra_ERC ha provocado que el acto de los 3 expresidentes no fuera destacado por los medios controlados por los republicanos con la solemnidad requerida. Al contrario, se quiso esconder o se banalizó su significado. La culpa también hay que atribuirla a los organizadores, que no consiguieron implicar a la mayoría indepe en el acto.

4. Los 3 expresidentes pertenecen a la Generación Tapón (1945-65), la que estorba, según definición de @SalaiCullell. El estado ha facilitado el trabajo a la quejosa Generación X (1965-81), que se siente perdida, a pesar de que tiene en sus manos el poder cultural, mediático y político. Solo se les resiste el poder económico, a manos de la gerontocracia unionista.

5. Esta Generación X tendría que ser la Generación I (la de la Independencia), post 1-O, si supiera construir un discurso menos quejica, cínico, sectario y nihilista. Demasiado mayores para acudir a Urquinaona, que se llenó de millennials (1982-96), generación a la cual pertenece @perearagones, no saben como encarar el futuro sin culpar a las otras generaciones.

6. El estado ha inhabilitado a 2 presidentes de la Generalitat y ha depuesto a otro. Eso debería ser suficiente para que todos los independentistas cerraran filas con los presidentes perseguidos. Los sarcasmos y las bromas sobre el acto de Perpiñán o el ocultamiento mediático responden a un sectarismo político suicida.

7. A Artur Mas lo noqueó la CUP y el estado lo remató. A @KRLS lo depuso el 155 y a @QuimTorraiPla lo ha inhabilitado el poder judicial posfranquista. Cebarse con los 3 presidentes por partidismo es una nueva demostración de hasta qué punto la frustración invita a perder el norte a toda una generación. La que manda, curiosamente.