El Toyota RAV4 es uno de los modelos estrella de la marca japonesa. Es cierto que los modelos de dimensiones más reducidas como el Corolla, el C-HR, el Yaris Cross o el Yaris están logrando cifras de ventas mejores que el SUV de tamaño medio de la marca, pero también lo es que el RAV4 sigue siendo un referente en su segmento.
Entre otras cosas porque es uno de esos SUV que, sin ser un premium, se acerca mucho a ellos pero manteniendo un precio comedido. Toyota lleva años apostando por la hibridación en sus motores, una apuesta en la que este RAV4 ha sido muy protagonista y que le ha ayudado, por ejemplo, a ser ahora la marca más vendida en nuestro país.
Como no podía ser de otra manera, la idea del fabricante no es otra que la de seguir apostando por este tipo de motores teniendo en cuenta su éxito y que el mercado se encamina cada vez más en esa dirección.
Eso sí, la idea de Toyota no es tan sólo potenciar sus híbridos, sino la de hacer lo propio con sus modelos con motor hibrido enchufable, un tipo de motor más caro que el HEV convencional pero que aporta muchos beneficios.
El Toyota RAV4 PHEV es ya una mejor opción que el RAV4 híbrido
Y más en este caso. Y es que, este RAV4 con motor híbrido enchufable puede presumir, entre otras cosas, de ser uno de los pocos modelos con este tipo de mecánica que promete unos consumos muy moderados.
Es muy habitual en estos modelos que, una vez se acaba la batería de los motores eléctricos, el consumo del motor de combustión se dispare de forma alarmante. No es el caso en este RAV4 PHEV que, además, logra tener, al margen de una tracción a las cuatro ruedas gracias a tener un motor eléctrico en cada eje, una autonomía en modo eléctrico de más de 75 kilómetros.
Y en Toyota quieren potenciar sus ventas, de ahí que ahora hayan rebajado su precio 2.500 euros fijando el precio de la versión más básica en 46.950 euros, lo que implica una diferencia de poco más de 11.000 euros respecto a la versión híbrida convencional.
No es una diferencia menor, pero este RAV4 PHEV cuenta con muchos puntos a favor, entre ellos, la etiqueta CERO de la DGT, 80 caballos más de potencia, mucha mayor autonomía en modo eléctrico, un consumo muy atractivo y tracción a las cuatro ruedas.