Si bien es cierto que fue hace ya unos años cuando en Tesla aseguraron que su idea no era otra que convertirse en la marca que acercar a los coches eléctricos a las grandes masas, también lo es que, al menos a día de hoy, por mucho que los precios de sus modelos vayan bajando poco a poco, siguen siendo una marca que se codea mucho más con las premium que con las generalistas.
Es más, no es que sea precisamente ningún secreto que buena parte de las marcas premium han dado un fuerte acelerón en los últimos años con sus modelos 100 × 100 eléctricos para, entre otras cosas, intentar robarle parte del mercado a los de Elon Musk.
Uno de los puntos fuertes de Tesla es la imagen que tiene como marca, algo que ocurre también en otras industrias como es el caso de la telefonía móvil o la informática con el caso de Apple. Es por eso que, aunque en algunos casos algunas opciones de marcas premium como BMW, Mercedes o Audi sean mejores por prestaciones, siguen siendo mucho más que en el patio es la un escalón por delante en cuanto a estatus de marca.
El Tesla Model 3, una opción más sensata que el BMW i4
En el caso del Tesla Model 3, el modelo de acceso a la gama de la marca americana, una sus rivales directos es precisamente el BMW i4, uno los modelos también más interesantes dentro de la gama de la marca alemana.
Son muchos, especialmente aquellos que están dispuestos a gastarse una buena cantidad de dinero, los que tienen estas dos opciones a la hora de hacerse con un eléctrico con lo último en tecnología, un diseño muy atractivo y unas prestaciones y autonomía ya muy por encima de la media. Precisamente las autonomías son algunos de los puntos fuertes de estos dos modelos, siendo de casi 500 kilómetros en el caso de la versión más sencilla del Model 3 y de también casi 500 km en el caso de la versión más básica del i4.
Pero el principal problema para BMW es que, precisamente con la voluntad de situar a subir cuatro un escalón por encima del Model 3 en cuanto a estatus del modelo en el mercado, ha fijado un precio de más de 57.000 €, una cantidad que impide a este modelo acogerse al Plan MOVES del gobierno, el plan que busca incentivar la venta de modelos eléctricos e híbridos enchufables. Un plan que sí que puede acogerse el tesla, que tiene un precio de partida de 46.200 € que, sumando las ayudas del gobierno, acaba quedándose por debajo de los 40.000 €.
De ahí que, aunque quizás el BMW tenga un diseño mucho más atractivo y tenga ese aire quizás más deportivo que el Model 3, el Tesla es la opción más racional en cuanto a relación calidad precio de estos dos modelos.