El Dacia Duster ha cerrado mayo de 2025 con un dato revelador: ha superado al Kia Sportage en matriculaciones mensuales en el mercado español. Con 1.683 unidades registradas frente a las 1.611 del modelo surcoreano, el SUV rumano consolida un giro estratégico que lo ha llevado a competir de tú a tú con modelos tradicionalmente mejor posicionados en el segmento. Esta victoria puntual refleja un cambio de percepción más profundo en torno a un vehículo que, sin abandonar su esencia práctica, ha evolucionado en diseño, tecnología y oferta mecánica.
La tercera generación del Duster, lanzada recientemente, ha marcado un punto de inflexión. Construido sobre la plataforma CMF-B del Grupo Renault, ha ganado en rigidez estructural y eficiencia sin renunciar a un precio contenido. Lo destacable en este caso es que la gama mecánica incorpora soluciones adaptadas a las nuevas exigencias del mercado: versiones híbridas de 140 CV, mild hybrid de 130 CV y una alternativa bifuel compatible con GLP de 100 CV. Esta diversificación ha permitido ampliar su base de clientes y adaptarse a normativas cada vez más estrictas en cuanto a emisiones.
Además del cambio técnico, el rediseño exterior ha sido clave para reposicionar al Duster. El nuevo lenguaje de diseño apuesta por líneas más angulosas, una parrilla más marcada y una iluminación LED de firma propia. El habitáculo también ha dado un salto en calidad percibida, incorporando nuevos materiales, una pantalla multimedia de mayores dimensiones y asistentes de conducción de última generación, hasta ahora ausentes en modelos previos de la marca.
El contexto del mercado ha favorecido esta progresión. Mayo cerró con un crecimiento del 18,6% en las matriculaciones generales respecto al mismo mes del año anterior, impulsado en parte por las nuevas ofertas electrificadas. En este sentido, Dacia ha aprovechado el momento para escalar posiciones, situándose como la cuarta marca con mayor volumen de ventas en el mes. Cabe destacar que este avance se ha producido sin una subida significativa en el precio de acceso del Duster, que sigue partiendo por debajo de los 20.000 euros.
Una evolución que empieza a dar frutos
El cambio de rumbo en la estrategia del Duster responde a una apuesta clara por redefinir su propuesta sin abandonar los pilares que cimentaron su éxito: simplicidad, robustez y precio competitivo. En esta nueva etapa, ha conseguido mantener esas cualidades incorporando mejoras sustanciales en conectividad, eficiencia energética y habitabilidad, aspectos cada vez más valorados por el comprador medio.
Por otro lado, su victoria sobre el Kia Sportage en mayo no es un hecho aislado, sino el resultado de un crecimiento sostenido a lo largo del primer semestre del año. Aunque el Sportage sigue por delante en el acumulado anual, la distancia se ha acortado notablemente, dejando entrever un posible cambio de liderazgo si la tendencia se mantiene en los próximos meses.
Llama especialmente la atención cómo la marca ha logrado mejorar su percepción sin apoyarse en grandes campañas mediáticas, sino mediante una renovación sólida del producto. Esta transformación paulatina, tanto en imagen como en contenido, ha reposicionado al Duster como una opción racional, moderna y funcional, capaz de atraer a un público más amplio sin perder a sus seguidores tradicionales.
El ascenso del Dacia Duster en el mercado español no solo supone un éxito para la marca, sino también una muestra de cómo un modelo puede reinventarse sin renunciar a su esencia. En un segmento cada vez más competitivo, su evolución marca una referencia clara de adaptación y eficiencia.