Hace apenas unos años la inmensa mayoría de los que buscaban un sur de tamaño medio solían acudir o bien a marcas generalistas sino tenían un presupuesto muy ajustado o bien a marcas low-cost como es el caso de Dacia si tenían un presupuesto realmente ajustado.
Así, modelos como el Nissan Qashqai, el Dacia Duster, el Seat Ateca o el Hyundai Tucson se han convertido en auténticas referencias y en auténticos súper ventas tanto en el mercado español como la inmensa mayoría de mercados europeos en los últimos años. Sin embargo, hace ya un tiempo que están empezando a parecer opciones realmente interesantes que no llegan precisamente ni de Europa, ni de Japón ni de América, sino que lo hacen desde China, un mercado que está viendo en el mercado del viejo continente una nueva oportunidad para ampliar aún más su cuota de mercado a nivel mundial.
Y es que son cada vez más las marcas chinas que están aterrizando en nuestro país, marcas que suelen apostar, ya sea con modelos low-cost, con modelos de precio medio o con modelos incluso pensados para los más premium, por una relación calidad precio con la que muchas marcas europeas, japonesas y americanas de momento no pueden luchar.
El OMODA 5 lo tiene todo para triunfar
Un buen ejemplo de ello es el OMODA 5, el modelo que este fabricante chino que forma parte del gigante asiático Chery pone a la venta en nuestro país. Como no podía ser de otra forma, el mejor argumento de venta de este modelo frente a sus rivales ya muy asentados en el mercado español es su relación calidad precio.
Y es que cabe tener en cuenta que, siempre y cuando financiamos la compra con la marca, el precio de partida de la versión de acceso de este modelo se queda por debajo de los 25.000 €, un precio que se sitúa bastante lejos del precio que tienen las versiones de acceso de los Qashqai, Tucson y compañía.
Lo mejor en su caso es que llega muy bien dotado de serie en todos los sentidos, tanto a nivel mecánico con una mecánica de gasolina de 185 caballos de potencia asociado a una transmisión automática, como a nivel de equipamiento, en el que cuenta con bastante más tecnología y bastantes más ayudas a la conducción respecto a las que cuentan algunos de sus rivales directos. Además, otro punto a su favor y que evidencia la confianza que tiene la marca en su proceso de fabricación y en su calidad de materiales, es que la marca ofrece siete años de garantía o 150.000 km, lo que ocurre antes.