El BAIC X55 llega al mercado con una propuesta clara: ofrecer más tamaño, mejor equipamiento y mayor potencia que el Dacia Duster por una diferencia de precio contenida. Aunque su tarifa de acceso es más elevada, se sitúa en un rango que no lo aleja en exceso de las versiones más completas del modelo rumano. Esta combinación convierte al SUV chino en una opción seria para quienes buscan dar un paso más sin abandonar el enfoque racional que define al Duster.
Con 4,62 metros de longitud, el X55 entra en el segmento de los SUV compactos con una ventaja clara en dimensiones. Frente a los 4,34 metros del Duster, ofrece una mayor presencia exterior y un habitáculo más generoso en todas sus cotas. La distancia entre ejes, de 2,73 metros, garantiza una buena habitabilidad trasera, mientras que el maletero se mantiene en cifras competitivas. En términos de diseño, presenta una estética moderna, con líneas limpias, una silueta fluida y detalles como los faros LED o las llantas de 19 pulgadas que refuerzan su carácter sofisticado.
Mecánicamente, el X55 apuesta por un motor 1.5 turbo de 177 CV, asociado a una caja automática de doble embrague con siete velocidades. Esta configuración entrega una experiencia de conducción más refinada y potente que la de cualquier versión actual del Dacia Duster, sin por ello comprometer la eficiencia en el uso diario. La tracción delantera y una suspensión orientada al confort completan un conjunto bien resuelto para circular tanto en ciudad como en carretera.
Más equipado, más avanzado y no tan más caro
Donde el BAIC X55 toma verdadera distancia frente al Duster es en el equipamiento. Desde la versión de entrada, incorpora acceso y arranque sin llave, climatizador automático bizona, tapicería de cuero sintético, techo solar eléctrico, pantalla multimedia de gran formato, cámara 360°, control de crucero adaptativo, detección de ángulo muerto, frenado automático de emergencia y sensores de aparcamiento delanteros y traseros. En comparación, incluso las versiones más equipadas del Duster requieren paquetes adicionales para igualar una parte de esta dotación.
A pesar de estas diferencias, la ventaja del X55 no implica un salto de precio desproporcionado. Parte desde poco más de 31.000 euros, una cifra superior al Duster, pero no tan alejada si se considera lo que ofrecen las versiones Extreme o Journey del SUV rumano con motorización ECO-G y acabado completo. En ese contexto, el modelo chino se posiciona como una opción con una relación valor-precio especialmente interesante.
Cabe destacar que el X55 apuesta por una experiencia de conducción más cercana a la de un SUV urbano de gama media que a la de un todocamino básico. Su enfoque, sin renunciar a la practicidad, prioriza el confort, la tecnología y la percepción de calidad, tres apartados en los que supera ampliamente al Duster. Para quienes están dispuestos a ampliar algo su presupuesto a cambio de un producto claramente superior, el BAIC X55 representa una alternativa lógica, coherente y convincente.