El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha avisado a la primera ministra británica, Theresa May, de que los 27 no renegociarán el acuerdo del Brexit horas después de que la primera ministra británica haya aplazado la votación en el parlamento británico. Tusk lo ha advertido en un tuit: "No renegociaremos el acuerdo, incluyendo el 'backstop', pero estamos preparados para hablar de cómo facilitar la ratificación en el Reino Unido". Además, admite que el tiempo para obtener el aval de los británicos al borrador se está acabando y asegura en este sentido que los estados debatirán esta semana sobre el grado de "preparación" para un escenario de no acuerdo.

En el mismo mensaje en Twitter, Tusk ha anunciado también que convocará a los líderes en una reunión a 27 este jueves para abordar el Brexit, coincidiendo con la cumbre europea que se hará en Bruselas el jueves y viernes.

Esta misma mañana, en una comparecencia en la Cámara de los Comunes, May ha reconocido este lunes que la solución para la frontera irlandesa "genera muchas preocupaciones" y ha anunciado el aplazamiento de la votación para evitar un rechazo "mayoritario" a Westminster. Algunos informes, recogidos por la prensa del país, ya habían asegurado que que May tenía un 95% de posibilidades de perder la votación del martes.

Durante la comparecencia, May ha explicado que intentará abrir negociaciones con sus socios europeos y ha anunciado que se reunirá esta semana con varios líderes europeos para "discutir" las "preocupaciones" de los parlamentarios sobre la solución de la frontera irlandesa.

Uno de los puntos que May pretende abordar -aunque posteriormente Tusk ya ha dicho que no renegociarán en el acuerdo- tiene que ver con el 'backstop' o el plan de contingencia para la frontera irlandesa. La líder tory quiere dotar al parlamento británico de voz a la hora de establecer un límite temporal a la alineación de Irlanda del Norte y que esta no se aplique "indefinidamente". Es decir, que los diputados tengan la última voz sobre la fecha de caducidad del plan de contingencia.

Hasta ahora estaba previsto en que el parlamento británico votara el martes el borrador de acuerdo del Brexit pactado entre Londres y Bruselas y avalado por los 27 estados miembros, pero May tenía muy complicado obtener la luz verde al texto por la oposición de los laboristas, del SNP, los irlandeses del DUP y parte de su mismo partido.