"Si no soy elegido, habrá un baño de sangre en el país", ha pronosticado el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en un mitin en Ohio. El futuro candidato republicano a las elecciones presidenciales de noviembre, después de haber conseguido el número de delegados suficientes, ha pronunciado estas palabras en medio de un discurso sobre la industria automotriz del país. En un momento posterior de su discurso, sin embargo, ha reiterado este pronóstico catastrofista y ha asegurado a su audiencia: "Si no gano estas elecciones, no estoy seguro de que volváis a tener otras elecciones en este país". El equipo de campaña del actual presidente y futuro candidato demócrata, Joe Biden, ha interpretado estas palabras como un intento de Trump de repetir el asalto al Capitolio del 6 de enero del 2021. "El pueblo americano le dará una nueva derrota electoral este noviembre porque sigue rechazando su extremismo, su afición por la violencia y su sed de venganza", afirman los demócratas.

El magnate ha apuntado en el suyo discurso a la posibilidad de una guerra comercial entre los EE.UU. y China en relación con la construcción de coches, y en este sentido, ha prometido medidas proteccionistas para proteger la producción nacional. "Si me está escuchando, presidente Xi (Jinping)", ha empezado el expresidente, "estas plantas monstruosas de construcción de coches que estás construyendo en México ahora mismo, pondremos un arancel del 100% a cada coche que nos encontremos", ha afirmado. "No podrás vender estos coches si soy elegido", ha asegurado, y es en este momento que ha augurado que, al contrario, si no es elegido, habrá un "baño de sangre". Ante la interpretación de estas palabras como una amenaza general, especialmente por parte de los demócratas, la portavoz de campaña de Trump, Karoline Leavitt, ha confirmado que el expresidente se refería a la industria automovilística. "Las políticas de Biden crearán un baño de sangre económico para la industria y los trabajadores de la automoción", ha dicho.

Trump pone en duda que los inmigrantes sean "personas"

La mención al baño de sangre, sin embargo, no han sido las únicas palabras polémicas del discurso de Trump en Ohio, ya que también ha calificado de "rehenes" a los detenidos por participar en el asalto en el Capitolio. "Los han tratado horriblemente e injustamente, todo el mundo lo sabe", ha afirmado Trump, que ha prometido indultarlos si consigue llegar de nuevo a la Casa Blanca. Por otra parte, el magnate ha puesto en duda que los inmigrantes indocumentados sean "personas". "No sé si se les puede llamar personas. Opino que en algunos casos no son personas, pero no puedo decir eso, porque la izquierda radical dice que es una cosa terrible", ha afirmado.