Ya hay una familia norteamericana –aparte de los Clinton– que ha confesado abiertamente que votará por Hillary. Y esta familia es conocida por todos: se trata de los Simpsons.

En un anuncio de promoción de la serie, protagonizado por Homer y Marge Simpson, la pareja protagonista, ella se muestra preocupada por no saber a quién votará en las próximas elecciones. Lo resuelve después de mirar un spot en el que se plantea la cuestión de por qué candidato votar si estallara un problema a las tres de la madrugada.

En ningún momento se resaltan bondades de Hillary Clinton, si no que se entiende que Marge –y como consecuencia, Homer– se deciden por la candidata demócrata por eliminación. Y es que el líder republicano, Donald Trump, no puede salir más maltrecho.

Primero, el magnate rechaza contestar la llamada de aviso de la crisis que habría estallado, porque está escribiendo un tuit a Elizabeth Warren, una política demócrata muy crítica con él. Después, ahora sí, responde la llamada, pero antes de hacer nada para solucionar el problema necesita que un equipo de esteticistas le maquille –hasta límites insospechados–, y que le pongan la peluca. Cuando ya está preparado para actuar, la flota china avanza y entonces afirma que hay que poner un muro... en el océano.

Para poner la guinda a la escena de Trump, en la cama donde el candidato republicano duerme hay un libro con los "grandes discursos de Hitler", y en la pantalla del móvil que sujeta aparecen algunos contactos del republicano, que son su hija, Ivanka, u otros más curiosos como el presidente de Rusia, Vladimir Putin, o el escritor de discursos de Michelle Obama, haciendo referencia al discurso que la mujer de Trump habría plagiado de otro de la actual primera dama norteamericana.

No es la primera vez en que los Simpsons se mojan por temas políticos. De hecho, esta ha sido la tónica habitual en la historia de la serie. Uno de los últimos ejemplos lo encontramos en la campaña de las elecciones de 2012 entre Barack Obama y Mitt Romney. Homer duda, pero termina votando al candidato republicano. Eso sí, después parece que se arrepiente al enterarse de algunos datos del pasado de Romney:

En otra ocasión se hace referencia al expresidente George Bush, quien venció por muy poco a Al Gore en las presidenciales de 2000, y de las que se dijo que el recuento de votos se podría haber manipulado hasta darle la victoria:

Más allá de los Estados Unidos, en los Simpsons también han aparecido referencias a política internacional –en un episodio de 2008, por ejemplo, se tildó al expresidente argentino, Juan Perón, de "dictador militar"–, así como a otros temas sociales como la homosexualidad o el derecho a tener armas.