La Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha comprometido a investigar las denuncias de más de 50 mujeres a trabajadores humanitarios por abusos y explotación sexual durante el brote de ébola en la República Democrática del Congo. Según habrían descrito, las mujeres habrían sido asaltadas en diferentes hospitales y los trabajadores de diferentes ONGs mundiales las habrían obligado a tener relaciones sexuales, dos se quedaron embarazadas. Las acusaciones van desde el año 2018 hasta el mes de marzo de este año, según detalla la cadena británica BBC.

De hecho, según el diario británico The Telegraph, pocas organizaciones no se han visto afectadas por este asunto. Las mujeres que han denunciado los abusos habrían señalado organizaciones como la OMS, Unicef, Oxfam, Médicos Sin Fronteras (MSF), World Vision, Alima y la agencia de migración de la ONU, OIM.

Las acusaciones se producen dos años después de que las organizaciones se comprometieran a terminar cuando salió a la luz que Oxfam había encubierto una investigación sobre la contratación de prostitutas, algunas supuestamente menores de edad, por parte del personal que trabajaba en Haití después del terremoto del 2010. Save the Children y Plan International también se vieron manchadas en este escándalo y denunciaron casos de abuso sexual por parte de miembros del personal.

"Graves consecuencias"

Después de que la agencia de noticias New Humanitarian y la Fundación Thomson Reuters hayan llevado a cabo una investigación al respecto de casi un año, la OMS ha manifestado que las acusaciones serían investigadas. A través de un comunicado que también recoge la cadena británica, la organización habría expresado que "cualquier persona identificada como involucrada tendrá que pasar cuentas y se enfrentará a graves consecuencias, incluyendo el despido inmediato". "La traición de las personas en las comunidades donde servimos es reprobable".

Según varios medios, unas 2.000 personas murieron en el brote de ébola del Congo, y fue la misma OMS quien lideró los esfuerzos mundiales por frenar la propagación del brote que se declaró 'terminado' este mismo mes de junio. La ONU y diferentes ONGs han prometido tolerancia cero con el abuso sexual después de que hayan surgido acusaciones similares en otros países.

Relaciones sexuales a cambio de trabajo

Esta última investigación, según recoge el The Telegraph, revela que una mujer de 32 años y superviviente del ébola, explicó que un hombre la llamó por teléfono y la invitó a una sesión de asesoramiento en un hotel. A priori un hecho que podría considerarse 'normal' o que no llamaría especialmente la atención debido a que se pidieron miles de números de teléfono para hacer un seguimiento de los pacientes una vez dados de alta.

En el vestíbulo aceptó un refresco y horas después se despertó sola y desnuda en una habitación. Ella cree que fue violada, expone el diario británico. "Perdí a mi marido por el ébola" y según detalla había preferido mantenerme en silencio porque ya se había sentido bastante rechazada "por la gente que tenía miedo de contagiarse". "No recibí ayuda, recibí más trauma".

Otras mujeres, explica el diario, fueron obligadas a tener relaciones sexuales a cambio de trabajo en las mismas organizaciones.