El Senado de los Estados Unidos ha aprobado abrir el debate de la polémica "Grande y Preciosa Ley" de Donald Trump, que plantea una reforma fiscal ambiciosa y dispara el gasto de la administración. Los republicanos afines al magnate han conseguido sacarla adelante con muchas dificultades, después de que el mismo presidente convenciera in extremis a algunos del mismo partido que cuestionaban la iniciativa. Finalmente, la primera fase para hacer realidad la iniciativa se ha aprobado con 51 votos a favor y 49 en contra, con dos votos contrarios a la ley de los suyos —los republicanos cuentan con 53 de los 100 escaños en la cámara. La Casa Blanca quiere que esta ley esté aprobada el 4 de julio, el Día de la Independencia de los EE.UU. Por su parte, los Demócratas han optado por alargar al máximo la aprobación del documento, de 940 páginas. "Forzaré a esta cámara a leerlo de principio a fin", ha expresado el líder de la formación en el Senado, Chuck Schumer.

"Los EE.UU. quiere impuestos reducidos, incluyendo ningún impuesto sobre las propinas, horas extra y la seguridad social, deducciones de intereses en vehículos, seguridad fronteriza, un Ejército fuerte y una ley que es grandiosa para nuestros agricultores, manufactureros y para el empleo en general", ha escrito el líder del ejecutivo en su red social, Truth social.

¿Qué es la "Grande y Preciosa Ley"?

La autodenominada "Grande y Preciosa Ley" (en inglés, The One, Big, Beautiful Bill) es el proyecto estrella del presidente Trump. Esta recoge la ampliación de los recortes de impuestos de su primer mandato (2017-2021), eleva el gasto en defensa y el control migratorio, y reduce los programas sociales como Medicaid (la única cobertura sanitaria pública para menores de sesenta y cinco años de los Estados Unidos) y la ayuda alimentaria para familias vulnerables. Esta iniciativa ha causado discusiones entre los mismos republicanos: mientras algunos se oponen a los programas fiscales, otros alertan del impacto fiscal, que sumaría 2,4 billones de dólares a la deuda pública, según la Oficina Presupuestaria del Congreso. Precisamente, esta ley fue el detonante de la ruptura con el "empleado especial del gobierno", Elon Musk.

"Causará un daño inmenso al país"

Por su parte, Musk ha denunciado en su perfil de X que este borrador de ley que se ha aprobado en el Senado "destruirá millones de puestos de trabajo en los Estados Unidos y causará un daño estratégico inmenso". En este sentido, añade que la reforma "dará migajas a industrias del pasado" y "perjudicará gravemente a las industrias del futuro". El CEO de Tesla y SpaceX ya se opuso a la propuesta estrella de Trump cuando estaba en su gobierno, pero fue la semana después de abandonar el cargo que explotó: "Lo siento, pero ya no lo puedo soportar más. Este proyecto de ley de gastos del Congreso, masivo, escandaloso y lleno de tonterías, es una abominación repugnante", afirmó. En su opinión, la "Grande y Preciosa Ley" va en contra del trabajo de reducción de la deuda pública que ha llevado a cabo al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), el organismo consultivo encargado de ejecutar una drástica reducción del gasto federal de los Estados Unidos.

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