Historia surrealista la que llega de China. Un anuncio de trabajo en que una señora de Shanghái solicitaba una "doncella a la antigua" ha causado estupor en el país asiático, tanto por los cuestionables requisitos del lugar como por el elevado salario, que ronda los 20.000 dólares al mes (18.452 euros).
La empleadora pide una "cuidadora personal" que sea capaz de "saber que es el momento de poner los zapatos a la dama cuando ella estire los pies, y de desvestirla cuando ella sacuda los hombros", recoge con estas palabras el diario South China Morning Post y también se hace eco Efe.
Candidatas sin autoestima
El anuncio también indica que las candidatas tienen que ser "obedientes y no tener una fuerte autoestima", tener una estatura de más de 165 centímetros, pesar menos de 55 kilos, contar con estudios de Bachillerato como mínimo, con un aspecto limpio y "ser capaz de cantar y bailar bien".
Tal como recoge Efe, la agencia de empleo que publicó la oferta confirmó al medio Hongxing News que el lugar ya había sido cubierto, y que la empleadora contrató a dos "doncellas" que trabajarán en turnos de día y noche de 12 horas por un salario mensual de 140.000 yuanes cada una (15.790 euros).
Las tareas que tendrán que hacer las doncellas
La "doncella nocturna" tendrá entre sus tareas lavar y hacer masajes en los pies de la empleadora, así como prepararle frutas y agua en cualquier momento, según la agencia.
El salario medio mensual en Shanghái en 2021 es de 11.396 yuanes (1.500 euros), según la Oficina de Recursos Humanos y Seguridad Social de la megalópolis.
¿Es ilegal este trabajo?
El presidente de la Asociación de Empleados del Hogar de Chengdu, Wang Xiaobing, ha afirmado que los requisitos draconianos del lugar no son ilegales siempre que hayan sido acordados con antelación por las dos partes y no violen ninguna ley ni los derechos de las personas.
Sin embargo, el anuncio se ha hecho viral a las redes sociales chinas, donde las reacciones han sido variadas, incluyendo personas interesadas en el lugar por el alto sueldo ofrecido, y otras indignadas por unas condiciones laborales de otra época que atentan contra la dignidad de las trabajadoras, destaca Efe.