China ha dado un nuevo paso en su giro demográfico. A partir del 1 de enero de 2026 aplicará un IVA del 13% a los anticonceptivos, incluidos condones, píldoras y dispositivos intrauterinos. Es la primera vez desde 1993 que estos productos dejan de estar exentos de impuestos, un cambio que simboliza la ruptura definitiva con las políticas de control de la natalidad de la era del hijo único. La medida se integra en la reforma del IVA y llega acompañada de nuevos incentivos para los futuros padres, como la exención de tasas para guarderías y servicios preescolares. La estrategia encaja en el esfuerzo del gobierno por revertir la fuerte caída de nacimientos y frenar el envejecimiento acelerado de la población.

Aun así, el debate interno es intenso. En las redes sociales, muchos ciudadanos cuestionan la eficacia de encarecer los anticonceptivos como manera de incentivar la maternidad. Diversos usuarios alertan de que, si alguien no puede permitirse comprar condones, menos aún puede asumir el coste de criar un hijo. También se señala el riesgo de incrementar las infecciones de transmisión sexual y los contagios de VIH, que en China continúan creciendo entre los jóvenes por la falta de educación sexual

Los datos económicos explican parte del rechazo social. Según el Instituto de Investigación de Población YuWa, criar a un hijo hasta los 18 años cuesta de media el equivalente a 81.000 euros, es decir, 6,3 veces el PIB per cápita. Solo Corea del Sur supera esta cifra. En este contexto, el demógrafo He Yafu, en declaraciones recogidas por Bloomberg, considera que “la eliminación de la exención del IVA es, en gran medida, un esfuerzo simbólico y es poco probable que genere un impacto significativo a escala nacional”.

China ya no es el país más poblado del mundo

A pesar de nuevas subvenciones, más permisos de maternidad y paternidad, inspecciones laborales para evitar despidos de mujeres embarazadas y ayudas para familias con dos o tres hijos, la natalidad continúa en declive. En 2024 se registraron 9,54 millones de nacimientos, prácticamente la mitad que hace una década. La población total cayó por tercer año consecutivo y se sitúa ligeramente por encima de los 1.408 millones de habitantes. Recordemos que hace dos años, la India superó a China y se convirtió en el país más poblado del mundo, que ya cuenta con 1.454.607.00 habitantes.

A medida que avanza el envejecimiento y disminuye la fuerza laboral, Pekín intensifica iniciativas administrativas para promover la formación de familias y la estabilidad matrimonial. Entre las novedades, destaca el reconocimiento legal de parejas que conviven con intención de casarse y la creación de un mecanismo nacional de mediación familiar para prevenir conflictos y promover relaciones “igualitarias, armoniosas y civilizadas”.