Al menos 110 personas han muerto a causa de los incendios en Hawái, ha confirmado este miércoles en una rueda de prensa al gobernador del estado, Josh Green. De esta manera, Green ha explicado además que los equipos de rescate han conseguido peinar cerca de un 38% de la zona más afectada, en la isla de Maui. De momento se han podido identificar siete de las víctimas mortales, mientras que se han realizado autopsias en 35 cadáveres.

El proceso es complejo, ya que muchos de los restos encontrados son irreconocibles y muy pocas veces hay huellas dactilares, por lo cual los investigadores tienen que desarrollar perfiles de ADN y encontrar coincidencias con las muestras de los familiares.

En una rueda de prensa telefónica celebrada este martes, el director de la Oficina de Respuesta de la Administración para la Preparación y la Respuesta Estratégicas (ASPR, en inglés), Jonathan Greene, detalló que el Gobierno norteamericano ha enviado un equipo forense en Hawái para ayudar a la identificación de las víctimas.

Mientras tanto, crece el escrutinio de las compañías de servicios públicos y el posible papel en la tragedia. El medio norteamericano NBC se hizo eco este miércoles una demanda presentada contra la principal empresa de servicios del archipiélago, acusándola de negligencia para no apagar el sistema eléctrico antes de los fuertes vientos que azotaron las islas la semana pasada.

Por su parte, la cadena ABC emitió una entrevista con el director de una empresa de monitorización eléctrica en que el experto aseguró que una explosión probablemente causada por la caída de un árbol sobre un cable de alta tensión pudo ser responsable de alguno de los fuegos. Mientras tanto, el presidente norteamericano, Joe Biden, anunció que viajará el lunes que viene 21 en la isla de Maui para visitar la zona afectada por los incendios más graves que ha vivido el país en el último siglo.

Hawái no consideró los riesgos de incendio como un problema

Hawái subestimó el riesgo de incendios. En un informe que se publicó el año pasado, los funcionarios destacaban que los tsunamis, los terremotos y los volcanes podrían suponer una amenaza para la isla. Ahora bien, los funcionarios dijeron que los incendios forestales tenían un riesgo "bajo".

Un año y medio después, los incendios catastróficos de Maui han arrasado casas, calles y municipios enteros. Se ha convertido en el desastre natural más mortífero del estado en más de seis décadas, con 110 muertos. Los funcionarios no solo habían minimizado el impacto, sino que también habrían dicho que faltaban recursos para mitigarlos, según una revisión de la CNN de los documentos de planificación de emergencia estatales y locales que muestran como de mal preparado estaba el estado para el desastre.

El informe del condado sobre la prevención de incendios forestales del 2021 indicó que, aunque la cantidad de incendios se había disparado, los fondos para prevenirlos eran "inadecuados". El informe también indicó que el plan estratégico del departamento de bomberos del condado no incluía "nada sobre el que se puede y se tiene que hacer para prevenir incendios" en lo que fue "un descuido significativo". El informe pedía y recomendaba una evacuación exhaustiva de los riesgos de incendios, pero no está claro si los funcionarios estuvieron lo bastante atentos a la recomendación