La joven Mahsa Amini, originaria del Kurdistán iraní, murió en manos de las autoridades del régimen teocrático de Irán hace cuatro meses. Desde su muerte, las protestas por todo el país no han cesado. Sin perder fuerza después de tantos meses, los ciudadanos iraníes claman contra el gobierno autoritario de los talibanes. Lo que empezó como un reclamo contra la muerte de Amini y la política de obligatoriedad del velo, ha evolucionado a una revolución que pide un cambio radical al país. Ante las protestas, el gobierno de Irán ha reaccionado con una violencia extrema. No solo se ha reprimido brutalmente las manifestaciones, también se han condenado manifestantes a muerte. Ante esta persecución de la protesta por parte del gobierno, muchos manifestantes obtén por el exilio para salvar la vida.

Huir de un régimen tanque hermético y autoritario como el de Irán no es sencillo. Según informe France 24, la mayoría de las personas que huyen de la persecución política lo hacen hacia el Kurdistán iraquí. El territorio kurdo se reparte por Turquía, Siria, Irán e Iraq. Desde la parte del territorio kurdo situado en Irán, muchos exiliados se han desplazado hacia Iraq.

manifestantmostren su solidaridad con los manifestantes iraníes

Manifestación en Italia contra las ejecuciones de manifestantes por parte del régimen de Irán. Foto: Riccardo Antimiani / Efe

El exilio de Paiman

El diario británico The Guardian se ha hecho eco de uno de los muchos exiliados que han seguido esta ruta, la cual es especialmente dura. En Paiman fue apaleado por la policía cuando protestaba contra el régimen iraní. En el hospital, recuperándose de las heridas, este veterinario de 28 años temía seguir la suerte de otros manifestantes: morir en manos de las autoridades iraníes.

Sus familiares no estaban dispuestos a permitir que eso que tantos otros manifestantes han experimentado se repitiera sobre Paiman. Su hermano lo sacó del hospital y junto con otros familiares se dirigieron hacia Iraq. Tuvieron que atravesar montañas y gran parte del viaje lo tenían que hacer a caballo.

En Paiman y su familia son de los pocos que han podido llegar hasta el relativamente más seguro Iraq, "donde algunos supervivientes de la violencia están intentando reagruparse", informa el diario. Hasta el momento, las autoridades kurdas iraquíes calculan que decenas de manifestantes han atravesado la frontera. Los mismos exiliados consideran que es probable que ya sean uno pocos centenares que se han refugiado en este país.

 

Imagen principal: Manifestación en solidaridad de las protestas en el Irán en Alemania. Foto: Clemens Bilan / Efe