Catalunya está llena de rincones impresionantes que parecen sacados de otra zona del planeta, pero que los tenemos a tan solo unos pocos minutos de casa. Uno de esos sitios que más impresiona la primera vez que lo ves es el Pla del Estany, una de las zonas más bonitas, y desconocidas para mucha gente, de Catalunya. Desde La Gandula de ElNacional.cat te enseñamos un salto de agua que seguro que os encantará en este territorio tan bonito.  

🤔Conoce el bonito salto de agua de Catalunya que todos los senderistas adoran

Un salto de agua mágico

En esta ubicación de nuestro territorio se encuentra una de las cascadas más mágicas, el salto de Martís. Si decidís ir hasta esta magnífica cascada debéis saber una cosa, la mejor época para ir es días después de que haya llovido, ya que os aseguraréis de que haya agua. Sin embargo, si vais en una época de sequía, lo más probable es que esta fantástica cascada se encuentre seca. 

Este salto de agua tan bonito se forma a través del agua que viene del estanque conocido como playa de l'Espolla, una de las zonas más conocidas del territorio. Este estanque cuenta con la peculiaridad de ser intermitente, se llena subterráneamente cuando hay épocas de lluvia. De esta manera, cuando este estanque está lleno, nutre de agua al salto de Martís, convirtiéndolo en una maravilla para los sentidos y en un spot muy solicitado para mucha gente con tal de sacar una foto para Instagram. 

Cuando la cascada lleva mucho caudal, la imagen es espectacular. El agua cae con una fuerza tremenda desde muchísima altura y eso hace que todos los que hayáis decidido ir hasta este famoso salto de agua os quedéis embobados mirando el agua caer. Para disfrutarlo bien hay un par de miradores y un camino corto con pasarelas y escaleras de madera que lo hacen fácil. Además, hay carteles que explican detalles curiosos del sitio para que podáis quedaros con algunas anécdotas que contar después. 

No es recomendable bañarse 

Meterse en el agua justo debajo no es muy buena idea, porque el hueco es pequeño y la caída llega con demasiada potencia. Aun así, un poco antes del salto se forman rincones más tranquilos donde podéis mojaros los pies y daros un chapuzón rápido. Este plan puede ser lo que buscáis para cambiar un poco y dejar de ir a la playa donde encontrar un hueco en la arena en agosto parece una misión imposible. Aunque en esta zona no os aseguramos que estéis solos, comprobaréis como la masificación se reduce drásticamente.

Aun así, siempre hay que tener respeto por el entorno y recoger siempre todo lo que ensuciamos, ya que para mantener estos espacios como los encontramos es necesario que todos colaboremos cuando vamos. 

Para llegar a esta zona, lo más sencillo es ir en coche hasta el pequeño núcleo de Sant Martí Sacalm, en la comarca de la Selva (Girona). Allí puedes dejar el coche y seguir a pie por un sendero señalizado que parte desde la misma iglesia del pueblo. El camino no es largo, en unos 20-25 minutos estarás frente al salto, atravesando un bosque fresco y agradable. El último tramo incluye pasarelas y escaleras de madera que facilitan el acceso hasta el mirador y el pie de la cascada.