Mayo es uno de los meses más bonitos de todo el año por muchos factores, uno de ellos tiene que ver con las temperaturas agradables junto con un ambiente primaveral antes de dar paso al verano. Además, en esta época del año podéis aprovechar para hacer muchas excursiones y escapadas geniales para salir de la rutina y desconectar con la familia o amigos.

Una ruta larga para hacer con toda la familia

A continuación os recomendamos una ruta que podéis hacer en esta bonita época del año y que también recomienda National Geographic: la ruta del Ferro i del Carbó. Este sendero está localizado entre los municipios de Ripoll y Sant Joan de les Abadesses, donde podréis ver uno de los saltos de agua más bonitos de Catalunya: el salto de agua de la Malatosca. Este sendero tiene mucha historia, ya que cubre uno de los tramos ferroviarios más antiguos que se mantuvo activo hasta el año de su centenario, el año 1980. 

En esta travesía recorreréis los 18 kilómetros de vía que conecta la naturaleza con la época industrial que vivió toda esta zona de Girona. La ruta cruza el valle de Malatosca y ubicaciones como el cargador de carbón de Toralles, pasarelas, puentes como el de Reixac o el de Perella, estaciones de tren o incluso túneles kilométricos. La excursión tiene zonas de ensueño como praderas interminables y vistas impresionantes durante prácticamente todo el camino.

La ruta también transcurre por lugares míticos como las vertientes del Cap de les Foses, el paraje de Les Solses o el Pont del Ferro que hay sobre el río Ter. La excursión la podéis hacer con toda la familia, incluso con los más pequeños, aunque tenéis que ir preparados con mucha agua, equipados con calzado adecuado y siempre teniendo en cuenta dónde está vuestro límite y si habéis hecho antes unas cuantas excursiones con vuestros hijos. No olvidéis que la ruta comprende 18 kilómetros, por lo que no es cualquier cosa.

Un salto de agua encantado

Una de las cualidades de esta ruta es que podréis ver muchos paisajes reunidos en una única excursión, una característica que atraerá a todas aquellas personas que quieran fotografiar diferentes retratos de un magnífico escenario natural.

Además, una de las atracciones de esta zona es el salto de agua de la Malatosca, donde os podéis incluso bañar si tenéis mucho calor durante la excursión. Eso sí, cuidado porque, según cuenta la leyenda, este pozo está encantado por las brujas. Este lugar era un sitio de reunión para las brujas y también un refugio de criaturas mágicas. Se dice que una de ellas, en agradecimiento a una comadrona que lo había asistido durante el parto, le ofreció como recompensa un puñado de lentejas. La mujer, decepcionada por el obsequio, las tiró en el fondo del río Ter. Pero al día siguiente, al ponerse el delantal, descubrió con sorpresa que una de las lentejas se había quedado enganchada y se había convertido en oro. Es por este motivo que este pozo es también conocido como el salto de agua de las Brujas.