El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ya han confirmado su asistencia a la XXXIII Reunión del Cercle d'Economia en Sitges (Garraf) que tendrá lugar del 25 al 27 de mayo. Ahora bien, una vez más, no coincidirán. Tal como ya sucedió en la última edición, Puigdemont hará la inauguración mientras que Rajoy se encargará de la clausura. Esta vez, como presidente investido y ya no en funciones.

"Política y economía en tiempo de incertidumbre". Este es el nuevo lema de las tradicionales jornadas de Sitges que tendrán a Juan José Brugera como nuevo presidente del Cercle d'Economia en sustitución de Antón Costas. A la espera de que se haga pública la lista completa de asistentes, también han confirmado su presencia: el ministro de Economía, Luis De Guindos, el vicepresidente y conseller de Economía, Oriol Junqueras y los exministros Cristina Garmendia y Josep Piqué. Tampoco se lo perderán el presidente de CaixaBank, Jordi Gual; el consejero delegado de Unilever, Paul Polman; el presidente de El Corte Inglés, Dimas Gimeno o el presidente de Gestamp, Francisco Riberas, entre otros.

Con el añadido de un referéndum anunciado, todo parece indicar que el Cercle d'Economia volverá a ejercer de puente entre Catalunya y España. En su última opinión de actualidad, se puso sobre la mesa que "una solución negociada es la única posible, con diálogo y con respecto al mercado legal". Todavía más: "Es indiscutible que el llamado conflicto catalán es de naturaleza política y que, lógicamente, su resolución sólo se conseguirá desde la política". Procurando mediar entre ambas partes, el lobbie empresarial propone lo siguiente: España tiene que asumir que el proceso soberanista es también su problema a la vez que Catalunya no puede renunciar a elaborar "una propuesta de contenidos que, sin rupturas, pueda responder a la mayor aspiración de un mejor autogobierno".