Barcelona quiere ser la encargada de disputar la mejor Copa América de la historia. Así lo ha asegurado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, este martes al Port de Barcelona en la presentación de la 37.ª edición de la competición. En más, el presidente ha añadido que esta competición, que llegará a Barcelona el año 2024, supondrá volver a situar Catalunya en el mapa deportivo mundial con lo que es considerado el tercer acontecimiento deportivo con más impacto económico del mundo después de los Juegos Olímpicos y del Mundial de Fútbol que será de unos 1.000 millones de dólares. En este sentido, Aragonès también ha querido remarcar que el objetivo de Catalunya tiene que ser dejar un buen legado en esta competición, ya que supondrá un gran impulso para la innovación en el sector náutico y, a grandes rasgos, un acontecimiento con un gran impacto positivo.

 

Así lo ha asegurado el presidente en una rueda de prensa donde también ha participado l'Emirates Team New Zealand, el equipo ganador de la última edición de la Copa América, celebrada en Nueva Zelanda y que ha sido quien ha escogido Barcelona como Usted de la próxima edición, que ha sido seleccionada por la calidad de las instalaciones del Puerto, la diversidad de espacios destinados a la competición, la experiencia de la ciudad al acoger grandes acontecimientos deportivos, su afición a los deportes náuticos y su oferta educativa y de ocio.

¡La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha celebrado la elección de Barcelona como sede de la 37.ª edición de la Copa América de Vela, asegurando que es "una gran noticia"!, ha exclamado la alcaldesa, que "tiene que servir para promocionar la ciudad en el mundo después de la pandemia, para fortalecer la tradición barcelonesa de este deporte en una ciudad de mar y, además, para dar un empuje en el sector emergente de la innovación y la tecnología, vinculadas a la náutica. Quiero agradecer a todas las instituciones públicas y privadas el apoyo y la complicidad en este proyecto", ha añadido.

El presidente del Port de Barcelona, Damià Calvet, ha puesto el Port Vell "a la disposición de la ciudad y del país para poder disputar una Copa América que proyecte Barcelona en el mundo y que tiene la innovación y la sostenibilidad como bandera". Calvet ha afirmado que "aprovecharemos las infraestructuras que ya tenemos en el Puerto y las pondremos al servicio del acontecimiento, impulsaremos la economía y el empleo y haremos que la Copa América deje un legado perdurable"

 

Por su parte, la presidenta de Barcelona Global, Aurora Catà, ha destacado que Barcelona y la Copa América de Vela comparten los principales valores de inclusión, diversidad, sostenibilidad, creatividad e innovación. "La asociación de la marca Barcelona con la Copa América de Vela es una demostración de todo lo que se puede conseguir con una colaboración público-privada. Estoy convencida de que esta unión será garantía de éxito en todos los aspectos: económico, social, organizativo y para el público".

Impacto económico de 1.000 millones de euros

Las primeras estimaciones indican que la Copa América de Vela tendría en Barcelona un impacto económico de entre 900 y 1.000 millones de dólares. La anterior competición, celebrada en Auckland (Nueva Zelanda), generó importantes beneficios económicos y culturales y atrajo una audiencia mediática de 940 millones espectadores.

La celebración de este prestigioso acontecimiento deportivo acogerá a unas 2.500 personas de los equipos deportivos y de organización, que pasarán muchos meses en la ciudad organizando la competición y los equipos. Además de los equipos que compiten en la Copa América de Vela, por primera vez en la historia de esta competición, se celebrará la regata de la Copa Amèrica Femenina, así como la popular regata de la Copa Amèrica Juvenil. Paralelamente a la celebración del acontecimiento en Barcelona, la edición contará con el Proyecto Hidrógeno, centrado en el desarrollo de motores de hidrógeno para las embarcaciones de apoyo.