Gerardo el 'Tata' Martino tuvo un paso muy fugaz por el banquillo del Barça, donde solo estuvo durante la temporada 2013/14. El entrenador argentino había dirigido durante cuatro años a la selección de Paraguay, a la que llevó a los cuartos de final en el Mundial de Sudáfrica, donde cayó contra España por 1-0 en un agónico partido que decidió, como fue habitual en ese torneo, un gol de David Villa. De Paraguay saltó a Newell's, donde estuvo una temporada y media en la que su equipo maravilló por un juego muy atractivo. Fue entonces, en verano de 2013, cuando el Barça apostó por él.
El Tata Martino no guarda buen recuerdo de su etapa en el Barça
Aunque consiguió ganar la Supercopa de España, no levantó ningún título más. En liga, si hubiera ganado la última jornada al Atlético de Madrid, la habría ganado, y la Copa se escapó en la final contra el Real Madrid. En Champions League, fue también el Atlético el que se interpuso en su camino, en este caso en los cuartos de final. Fue un año difícil a todos los niveles, pues el Tata asumió el equipo después de Tito Vilanova, que se tuvo que centrar en vivir de la mejor manera posible su último año.
Y el barcelonismo todavía tenía en la retina la etapa dorada de Pep Guardiola. Con todo este contexto, Martino tampoco lo pasó bien, como él mismo ha admitido. Ahora es el seleccionador de México, y se encuentra en Catalunya preparando a su equipo antes de viajar hasta Qatar. Este miércoles ganó 4-0 a Irak en el estadio del Girona, Montilivi, y aprovechando su estancia en Catalunya, fue preguntado por su etapa en el Barça, en la rueda de prensa posterior al choque.
Orgullo eterno de entrenar a los mejores
"Mentiría si dijera que ese año fue el de máximo esplendor, el que mejor me sentí y el que más disfruté porque fue exactamente todo lo contrario", dijo el de Rosario, que siguió dando sus explicaciones. "Tengo que repetir constantemente que cuando digo que fue mi peor año como entrenador tiene que ver con lo que siento desde un punto de vista personal", quiso matizar, porque siempre le quedará el orgullo de haber entrenado al Barça, como también explicó.
"No estoy decepcionado, para mí fue un gran aprendizaje. No puedo sentirme decepcionado en modo alguno por haber podido dirigir uno de los equipos más importantes del mundo", zanjó Martino. Su última experiencia en el fútbol de clubes, donde llevó a Atlanta United a ser campeón de la MLS, le valió su fichaje para el combinado nacional de México. Con la Tri ya ha ganado la Copa Oro, el equivalente a la Eurocopa para los países de la CONCACAF, y ahora tendrá la presión de hacer un buen papel en Qatar.