El Barça tiene muy avanzada la incorporación de Roony Bardghji, una de las perlas del fútbol europeo, que está a un paso de convertirse en nuevo jugador azulgrana. El extremo sueco llegará como una apuesta de futuro, a cambio de una cifra simbólica de 2 a 3 millones de euros, una operación que el club considera estratégica de cara a la próxima década.
A sus 19 años, Roony ya ha demostrado talento de sobra en el Copenhague, donde debutó siendo un adolescente y rápidamente se convirtió en uno de los jóvenes más prometedores del continente. El Barça ha estado siguiendo su evolución durante meses y ha aprovechado la situación contractual del jugador —termina vínculo en diciembre de 2025— para adelantarse a otros grandes clubes europeos que también lo tenían en el radar.
Pretemporada con Flick: una oportunidad de oro
El plan del club es que Roony se incorpore desde el primer día a la pretemporada bajo las órdenes de Hansi Flick. El técnico alemán ha dado el visto bueno a su llegada y quiere observarlo de cerca antes de tomar una decisión definitiva sobre su rol en la plantilla. No se descarta que empiece con ficha del filial, pero el jugador llega con una mentalidad muy clara: convencer al técnico de que puede quedarse en el primer equipo.
Roony lo sabe: llega a un club con una enorme exigencia, pero no le asusta la competencia. De hecho, su mensaje es directo y ambicioso: quiere competir con Lamine Yamal por un puesto en el extremo derecho. Pese a que el joven talento español es ya una realidad en el once azulgrana, Bardghji confía en su capacidad para aportar algo diferente y convertirse en una alternativa real en el esquema ofensivo de Flick.
Ilusión por vestir la camiseta azulgrana
El entorno del futbolista ha dejado claro que Roony está ilusionado como nunca por esta nueva etapa. Ha rechazado otras propuestas más lucrativas porque su deseo es crecer en un entorno como el del Barça, rodeado de jóvenes de su generación como Lamine, Cubarsí o Fermin, y bajo la tutela de un cuerpo técnico exigente y de alto nivel.
Además, desde el club están convencidos de que su potencial es enorme. Es un jugador con desequilibrio, buen disparo desde fuera del área y visión de juego, cualidades que encajan con el estilo que se quiere recuperar en el Barça.
Si bien aún debe adaptarse al ritmo de LaLiga y ganarse un sitio entre los mayores, Roony Bardghji aterriza en Barcelona con ganas de comerse el mundo, sabiendo que esta oportunidad puede marcar su carrera. Ahora depende de él demostrarlo desde el primer entrenamiento.