Fue el 14 de mayo del 2016 cuando el Barça visitó por última vez el Nuevo Los Cármenes de Granada. Victoria por 0-3 con hat-trick de Luis Suárez en la última jornada de la temporada pasada y título de Liga celebrado sobre el césped granadino. Ahora, casi once meses más tarde, los blaugrana vuelven a pisar Granada con una nueva Liga en juego (20.45h / Movistar Partidazo).
El partido será decisivo para este campeonato 2016/17, pero todavía no entra la posibilidad de título. Dos puntos y un partido menos que el Real Madrid, el Barça está obligado a ganar si no quiere ver sus opciones reducidas considerablemente.
El reto será mayúsculo y, a pesar de visitar a un rival en horas bajas y con un pie a Segunda División, ni Leo Messi ni Gerard Piqué estarán para dirigir el equipo. La tarea de actor protagonista tendrá que recaer en Neymar. Es el primer partido del último tramo infernal. Dos meses muy exigentes que empezarán con nueve partidos durante el mes de abril. La prueba inicial es contra la Granada.
La primera final
La competición se acaba, tres títulos en juego y cada partido es más importante que el anterior. No habrá traba hasta al menos el 27 de mayo. En Liga quedan diez partidos para no perder los blancos de vista. Después del parón por selecciones, vuelve el reto más complicado en que no dependen de sí mismos para ser campeones. Si se quiere ganar una nueva se tendrá que hacer con rotaciones, buen juego, victorias y a esperar que el máximo rival pinche.
El problema lo tendrá a un Barça sin Messi ni Piqué. El alma ofensiva y director de orquesta del 3-4-3 ha quedado fuera por sanción y vuelve el posible retorno del sistema clásico. Y el revolucionario fuera de los terrenos de juego tendrá un fin de semana más para descansar antes de afrontar partidos tan decisivos esta temporada como el del próximo miércoles contra la Sevilla o el de la Champions contra la Juventus.
El líder tendrá que ser una vez más Neymar. Exhibiéndose antes del periodo de selecciones, oye al hombre del histórico remontamiento y mandando también con su país, afronta el último tramo de esta incierta temporada con los galones de primer oficial.
El reojo de Segunda
La Granada es un rival presuntamente asequible. Penúltimos a la clasificación, tienen muy complicada la salvación que está a ocho puntos. Si a casa Barça hay diez finales, en Granada también tienen diez. Tampoco tienen la posibilidad de fallar.
Hace a tres partidos que no levantan la cabeza y la gran mezcla de jugadores de todo el mundo (hasta 15 países representados) no ayuda a la cohesión. Entre sus integrantes están un Sergi Samper disfrutando de algún minuto en su cesión del Barça y el exblaugrana Isaac Cuenca que no ha acabado de explotar. Al grada le falta ritmo, unidad y una idea de juego que Lucas Alcaraz no acaba de encontrar.
Los once de El Nacional
