Un Rafa Nadal muy condicionado por el esfuerzo físico realizado durante todo el torneo no ha podido repetir medalla al caer por 2-6, 7-6 y 3-6 ante el japonés Kei Nishikori. En dos horas y cincuenta minutos, Nishikori se ha llevado el bronce del cuadro individual de tenis.

A Nadal se le ha acabado la gasolina después de una agotadora semana donde ha participado en tres disciplinas –individuales, dobles y dobles mixto–. El partido de esta noche contra Nishikori ha sido bien diferente al de hace dos días contra Juan Martín del Potro por un lugar en la final después de tres horas y tres sets, con tie break en el último incluido.

El japonés, más fresco que el mallorquín, se lleva un bronce que ha tenido que sudar de lo lindo. Nadal no se lo ha puesto nada fácil y es que cuando lo tenía todo ganado con 6-2 y 5-2, el tenista balear ha protagonizado una de sus reacciones de arrebato y energía. La resurrección de Nadal le ha llevado a forzar el desempate del segundo set para ganarlo.

En la tercera manga, el aspecto físico ha sido todavía más decisivo. Nadal no ha podido contrarrestar los golpes del japonés que ha crecido con el paso de los puntos. El mallorquín dice adiós sin el bronce pero con la cabeza bien alta.