Aunque ha sido un blanco fácil para muchos, Álvaro Morata es toda una institución para la selección española. El actual futbolista del Galatasaray es el cuarto máximo goleador histórico de España y el capitán del equipo dirigido por Luis de la Fuente, pero, ni mucho menos ha sido siempre el favorito de la afición española.
Morata ha sido objeto de críticas, pitos e insultos que, a menudo, han trascendido a su familia. Todo, por su nivel de acierto con balón en los pies. En el mundo del fútbol, desgraciadamente, es algo habitual, pero la exigencia mental que ello comporta a él le superó, provocando que cayera en depresión y adoptara episodios de ataques de pánico y ansiedad durante los meses finales del 2024. Y este martes, un documental sobre su proceso de recuperación revelará los miedos que todo futbolista puede tener y que Morata se ha atrevido a mostrar.
"Me rompió la cabeza por dentro"
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) June 9, 2025
'𝐀́𝐥𝐯𝐚𝐫𝐨 𝐌𝐨𝐫𝐚𝐭𝐚: 𝐧𝐨 𝐬𝐚𝐛𝐞𝐧 𝐪𝐮𝐢𝐞́𝐧 𝐬𝐨𝐲'
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De tenerle pánico a la Eurocopa a salir campeón
Uno de los hilos conductores del documental es la pasada Eurocopa. Sus seres queridos admiten que Álvaro Morata "no quería ir a la Eurocopa", que "tenía mucho estrés" y que, incluso, pensó en "dejar el fútbol" de manera definitiva. En el tráiler del documental, su propia madre explica que Morata "ni siquiera podía ponerse una bota: cómo irá a una Eurocopa?". Y por su parte, el propio Morata revela que, antes de la Eurocopa, "se me pasó por la cabeza simular lesiones para no tener que estar (con la selección).
Y es que la pesadilla del jugador iba mucho más allá de los terrenos de juego: "Sientes que las piernas te duelen, el pecho se te cierra y no te entra aire en la garganta. Sientes mucha presión en el pecho, parece que te falta el aire", explica. Incluso, reconoce que "tenía miedo de dormir y no despertarme" y que, en general, "tenía miedo de todo".

De hecho, su psiquiatra, Pilar de Castro, cataloga la depresión que sufría el 7 de la selección española como "muy profunda", pero el propio Álvaro Morata pone especial énfasis en el apoyo que recibió de Luis de la Fuente. El técnico "trató de transmitirle al futbolista que le necesitábamos", y Morata, que afirma que el actual seleccionador es, "humanamente, el mejor entrenador que he tenido", argumenta que De la Fuente fue capaz "no solo entender mi problema, sino compartirlo y vivirlo como si fuera una cosa suya". Finalmente, España salió campeona de la Eurocopa con Morata como titular, culminando así una historia de superación digna de ser contada.