El nombre de Nico Williams está a punto de hacer historia en el FC Barcelona. La operación, que hace meses parecía estancada, ha dado un giro inesperado en los últimos días. Nico pidió a su representante que se pusiera en contacto con el Barça y le comunicara que aceptaría una rebaja de salario. Un gesto que ha gustado mucho en el club azulgrana, que ha decidido ir a por su fichaje de forma inminente.
De hecho, el acuerdo con Nico Williams se ha cerrado tras una reunión clave con Deco en Ibiza. Pero más allá del gesto económico, lo que ha resultado decisivo ha sido la presión emocional ejercida por Lamine Yamal, quien no ha ocultado su deseo de compartir vestuario con su amigo y compañero en la selección española.
La amistad entre Lamine Yamal y Nico Williams, clave en el fichaje del jugador del Athletic
La amistad entre ambos va más allá del campo. Han coincidido en varias concentraciones y han creado un vínculo que ahora ha sido aprovechado por el Barça para facilitar el traspaso. Lamine ha hecho pública su preferencia, tanto en redes sociales como en conversaciones dentro del club, expresando su entusiasmo por ver a Nico en el Camp Nou. Incluso subió una publicación a Instagramen la que aparecían ambos justo después de que salieran las primeras informaciones a la luz sobre los contactos del crack con el club de la capital catalana. No hay dudas de que el peso que tiene Lamine en el equipo ha decantado la balanza para que el Barça se decida a cerrar la operación. Una influencia que no está gustando a algunos de los pesos pesados del vestuario.
Raphinha, muy molesto con en el Barça
Especialmente molesto está Raphinha. El brasileño, que ha sido importante en la rotación ofensiva, no ve con buenos ojos que se esté promoviendo el fichaje de un jugador que ocuparía su misma posición. La llegada de Nico podría reducir su protagonismo, y las muestras públicas de afinidad entre Yamal y el navarro han calentado al brasileño.
Según fuentes cercanas al club, Raphinha ha hecho llegar a la dirección deportiva su malestar. Aunque no ha presentado una solicitud de salida formal, ha dejado claro que si pierde protagonismo en los próximos meses, valorará seriamente su futuro. La situación ha generado tensión en el entorno azulgrana.