El anuncio de la salida de Jürgen Klopp ha sido una de las grandes sorpresas de lo que llevamos de año. El alemán abandona Anfield después de nueve años en los que ha revolucionado un equipo que estaba en una crisis deportiva. Con la consecución de una Champions y la primera Premier League de su historia, entre otros títulos, los reds pueden estar más que satisfechos con su paso por el club.
Aunque Klopp ya ha anunciado que no seguirá entrenando la temporada que viene, cabe plantearse qué podría hacer el técnico germano si llegase al Barça. Los de Xavi Hernández se encuentran en una situación similar al Liverpool de 2015. La continuidad del entrenador catalán está en duda, como él mismo ha dejado ver en rueda de prensa. "Creo que me queda menos tiempo que más en el club", afirmó el egarense. Si los planes de Klopp cambiasen, la situación es un caramelo para que tome el relevo como culé.

Reencuentro con algunos veteranos
Si Klopp cogiese los mandos del primer equipo blaugrana, supondría una revolución en el estilo de juego del club. Con un ritmo vertiginoso y el uso de una presión asfixiante, la intensidad por la que se caracteriza el alemán contrastaría con la serenidad que transmite Xavi. No sería fácil, por lo tanto, plasmar su idea de juego. Pero para hacerlo contaría con la colaboración de dos viejos conocidos, Ilkay Gündogan y Robert Lewandowski. Ambos jugadores explotaron a sus órdenes en el Borussia Dortmund, con el que llegaron a una final de Champions en 2013. El actual entrenador del Liverpool sería el ideal para recuperar su mejor nivel en sus últimos años de carrera.
Pero el nuevo técnico culé no se limitaría solo a utilizar a los veteranos que ya conoce. Entre sus prioridades, estaría también la potenciación de grandes talentos como Pedri, el lesionado Gavi o Ronald Araujo. Ya sea por su calidad o su entrega en el campo, estos tres serían sin duda piezas clave del plan de juego de Klopp.

Limpieza en el vestuario
No obstante, no todos los jugadores del Barça estarían contentos con su llegada. Aquellos jugadores, veteranos especialmente, que no están dando lo que se espera de ellos no tendrían continuidad. Sergi Roberto o Oriol Romeu son dos buenos ejemplos. Su pasado en La Masia les ha librado de algunas críticas, pero Klopp no entiende de sentimientos.
Tampoco lo tendrían fácil para seguir los Joaos. Joao Félix ha demostrado que le sobra calidad, pero su irregularidad y falta de actitud en algunas ocasiones no serían aceptadas por el técnico de Stuttgart. Tampoco Joao Cancelo, quien ya tuvo problemas en el Manchester City con Pep Guardiola, y difícilmente mejoraría su situación con Klopp. Toda una revolución realizada con el objetivo de traer a los jugadores de su gusto.