Jorge Mendes es el representante de futbolistas más influyente del mundo a día de hoy. El luso, propietario de la empresa de representación Gestifute, que, entre otros, se encarga de velar por los intereses de los mejores futbolistas portugueses del mundo, tiene mucha influencia en varios clubs del mundo, pero de entre los grandes, se destaca por siempre tener grandes negocios en el FC Barcelona.
Y es que, en el pasado, los Adama Traoré, Nico González, Francisco Trincao y compañía fueron nombres protagonistas en los prolíficos contactos entre Joan Laporta y él, pero en el presente, aparte de futbolistas como Alejandro Balde o Lamine Yamal, Mendes es muy relacionado con el Barça por los dos Joaos. El pasado día del mercado de fichajes estival de 2023 fue una jornada trepidante en Can Barça, ya que Eric Garcia y Abde dejaron el club con el objetivo, entre otras cosas, de generar espacio salarial para hacer hueco para las fichas de João Cancelo y de João Félix.
João Félix, un esfuerzo económico para unirse al Barça para recordar
En el caso de Canceloo, el club culé consideraba su llegada una prioridad en vista de la necesidad del equipo culé de encontrar un lateral derecho de garantías. Desde la salida de Dani Alves, con los respetos de los grandes momentos regalados por un irregular Nélson Semedo, el Barça no ha tenido un futbolista fiable para el carril derecho que defensivamente cumpla y que ofensivamente sea un puñal.
Cancelo lo es y, además, provenía de un Manchester City que no contaba con él porque la relación entre el carrilero y Pep Guardiola explotó. Mientras tanto, en el caso de João Félix, también recaló cedido en el Barça por su difícil relación con el técnico del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone. Además, aunque Xavi Hernández no estaba convencido en el caso de la llegada del delantero, en el Barça se acabó de valorar positivamente cuándo João Félix hizo un esfuerzo económico muy importante para unirse a la plantilla blaugrana.
El Barça quiere retener a João Félix, pero su compra es inviable
El jugador solo quería vestir de blaugrana y el Barça se lo concedió gracias a que su baja ficha ayudó. Su rendimiento, a pesar de ser irregular, ha satisfecho a los dirigentes de la entidad catalana y por eso se le querría retener de cara a la próxima temporada. No obstante, su compra es económicamente inviable y se optaría por prolongar su cesión.