El Bayern de Múnich lleva varias temporadas regenerando su plantilla, fichando a jóvenes talentos o dando oportunidades a las perlas de su fútbol base en busca de otro núcleo duro en el equipo que dirige Julian Nagelsmann. Y claro, teniendo en cuenta el estilo de juego del conjunto bávaro y la delicada situación económica del Barça no es de extrañar que el Bayern se haya interesado en los últimos mercados en varios jugadores blaugrana.
Empezaron con Pedri, por el que ofrecieron 40 millones de euros cuando ni siquiera había debutado con el primer equipo del Barça. Y después fue el turno de Frenkie de Jong, tanteado cuando ficharon a De Ligt, y Gavi, por el que preguntaron cuando peligró la renovación del andaluz con el Barça. El Bayern, sin embargo, tocó hueso, ya que no pudo fichar a ninguno de los tres.
El Bayern quiere a Ansu Fati
Y ahora, tal y como informa Mundo Deportivo, el elegido del Bayern de Múnich es Ansu Fati, que no está atravesando un buen momento en el Barça. El 10 blaugrana, ya recuperado de sus problemas físicos, no está consiguiendo recuperar una versión reconocible, lo que ha llevado el debate a si debe o no continuar, teniendo en cuenta que es uno de los jugadores de la plantilla con un gran caché, por lo que un traspaso mejoraría mucho las cuentas del Barça, que además rebajaría considerablemente la masa salarial.
La primera oferta del Bayern por Ansu Fati ha sido de 40 millones de euros, una cifra muy baja para el Barça. El precio de salida que ha fijado el club blaugrana es de 60 millones de euros, por lo que si el Bayern, o el club que sea, pone encima de la mesa la cantidad, tendrá muchos números para llevarse a Ansu Fati, a no ser que el delantero dé un paso adelante y demuestre que puede ser uno de los mejores jugadores del mundo.
Ansu Fati sigue decepcionando
Mientras, Xavi Hernández va a seguir el plan establecido. El entrenador es el primer interesado en recuperar a Ansu Fati, pero no le está dando más minutos por las recomendaciones de los servicios médicos, que temen una recaída. En el primer tramo de la temporada, Ansu Fati se quejó de no tener demasiados minutos, pero con la sanción de Lewandoswki, su participación creció. El delantero fue titular contra el Girona y el Betis y su rendimiento fue muy deficiente. Ha perdido chispa con el balón en los pies, además de mostrar miedo a la hora de ir al choque.
El Barça apostó muy fuerte por él, tanto ofreciéndole un contrato de crack, como dándole el mítico dorsal 10, un movimiento simbólico para darle la batuta del equipo. Ansu Fati se lesionó, y desde entonces es una sombra del jugador que tenía que ser la nueva estrella blaugrana. O mejora mucho, o el delantero pasará a la lista de transferibles, con un precio de salida de 60 millones de euros.