La reciente eliminación del FC Barcelona en las semifinales de la Champions League no solo ha supuesto un duro golpe en lo deportivo, sino que ha desatado un terremoto interno que amenaza con alterar la estructura del vestuario. En el centro del debate se encuentra un nombre que, para muchos, ha perdido el foco: Ronald Araújo. Aunque no fue el único responsable de la caída ante el Inter de Milán, salir en la foto de los goles decisivos y su actitud posterior han levantado sospechas. El presidente Joan Laporta y otros miembros de la cúpula del club creen que el jugador ya no está centrado en el proyecto, porque tiene decidido marcharse.
Araújo fue señalado por su pobre actuación en los últimos minutos del choque, cuando el Barça había logrado lo más difícil: empatar una eliminatoria que parecía perdida. El central uruguayo entró desde el banquillo en la segunda parte, y lejos de aportar solidez, fue superado en ambas jugadas que culminaron con los goles italianos. En el gol del empate, fue incapaz de frenar a Francesco Acerbi, y en la prórroga, perdió el duelo directo ante Marcus Thuram, que definió el 4-3 final.
Sospechas de que Araújo tiene decidido salir del Barça
Esta es la segunda vez consecutiva que Araújo queda expuesto en una eliminación europea. El año pasado, fue expulsado en los primeros minutos del partido de vuelta ante el Paris Saint-Germain, cuando el Barça tenía una ventaja de dos goles, en lo que fue el inicio de la debacle. Su falta de contundencia en momentos clave ha generado crecientes dudas sobre su encaje en el estilo de juego que busca implementar Hansi Flick.
A todo ello se suman las declaraciones posteriores del jugador, en las que evitó asumir completamente la culpa. Justificó su colocación en el tercer gol y apuntó de forma indirecta a sus compañeros en el cuarto, lo que fue interpretado como una falta de autocrítica. Estas palabras, según fuentes del club, no gustaron nada en la directiva ni en el vestuario.
Araújo sabe que no será titular en el Barça de Flick
Desde hace meses, en los despachos del Barça se sospecha que Araújo ya ha tomado la decisión de salir. En enero, el jugador pidió irse a la Juventus, pero la lesión de Iñigo Martínez en la final de la Supercopa truncó el movimiento. A petición del cuerpo técnico y del vestuario, Araújo aceptó continuar y renovó hasta 2031, aunque con una cláusula de rescisión de solo 65 millones de euros, una cifra asequible para muchos grandes clubes.
El director deportivo Deco le prometió entonces que, si en verano quería, podrían buscar una salida. Ese momento ha llegado. Araújo sabe que ha perdido protagonismo, y que jugadores como Cubarsí, Eric García, Christensen e incluso Iñigo encajan mejor en el sistema actual. Además, el club ha iniciado conversaciones con Jonathan Tah, lo que refuerza la idea de que el ciclo de Araújo en el Barça está cerca de su fin.