El Barça - Paris Saint-Germain estaba marcado como el partido estrella de esta segunda jornada de la primera fase de la Champions League. Para muchos, esta debía ser la final de la temporada pasada, pero el equipo de Hansi Flick se quedó a las puertas, mientras que el de Luis Enrique se acabó llevando el preciado trofeo goleando al Inter de Milán en la final (4-0). Unos meses más tarde, ambos conjuntos se han visto las caras en Montjuïc, protagonizando un enfrentamiento que ha cumplido con las grandes expectativas generadas. Y es que el partido ha tenido de todo: ritmo, talento, tensión y una batalla táctica entre dos de los mejores entrenadores del mundo.

Combate nulo al descanso

A pesar de las numerosas bajas que han presentado los dos equipos, la puesta en escena de ambos elencos ha sido imponente. Desde el primer minuto, la intensidad ha sido máxima. Eso sí, el primer punto se lo ha apuntado Hansi Flick, porque el inicio del Barça ha sido demoledor. Con Eric Garcia de central para anular la presión parisina y Ferran Torres de '9' para aprovechar mejor los espacios a la espalda de Pacho y Zabarnyi, Lamine Yamal ha encontrado un escenario idílico para brillar. De sus botas ha nacido la primera ocasión clara: un pase con el exterior que ha dejado a Ferran solo ante el portero. Sin embargo, el valenciano no ha podido culminar la jugada en gol a pesar de superar al portero con un buen recorte.

Unos minutos más tarde, ha llegado la diana culé que hacía justicia, aprovechando una buena recuperación en campo contrario y una buena combinación entre Rashford y Ferran Torres. Pero el gol no ha intimidado al PSG, que ha demostrado por qué es el vigente campeón de Europa con una reacción de campeón. Luis Enrique ha movido ficha dejando los dos extremos muy abiertos y el carril central para los laterales (Achraf y Nuno Mendes). Y gracias a este ajuste ha nacido el gol del empate. Mendes ha tenido suficiente espacio para superar la presión culé con su potencia y, después de una conducción larguísima, ha dejado solo ante el portero a Mayulu, que no ha fallado. Un 1-1 al descanso que reflejaba la igualdad vivida también en la pizarra.

Movimiento ganador 'in extremis'

Después del paso por los vestuarios, el rumbo no ha cambiado. El Paris Saint-Germain ha reforzado su idea de hacer daño a través de los laterales, mientras que el Barça lo centraba todo a Lamine. Normal, delante tenía a un Nuno con amarilla y estaba inspiradísimo. Ambos entrenadores estaban muy contentos con su equipo y prueba de ello es que ninguno de los dos ha hecho ningún cambio hasta prácticamente el minuto 70, cuando el cansancio ha afectado a varios jugadores.

El Paris Saint-Germain ha acabado el duelo con muchos jugadores del filial y de las categorías inferiores, mientras que el Barça ha dado entrada a Casadó, Lewandowski, Balde y Marc Bernal, la gran sorpresa sustituyendo a Pedri. Con este contexto, quien parecía tenerlo mejor para llevarse la victoria era el conjunto culé, pero el equipo de Luis Enrique tenía más clara su idea: no dejar de presionar bajo ningún concepto. La última media hora del vigente campeón de Europa ha sido magistral, embotellando a los culés en su área y encontrando un último movimiento ganador en el 90 gracias a un gol 'in extremis' de Gonçalo Ramos que ha sentenciado el duelo. Un jaque mate en el 90' en una batalla entre dos de las mejores pizarras del combinado.