Un cabezazo de Vasili Berezutski en la última jugada del partido le roba dos puntos a Inglaterra. La selección de Roy Hodgson mostró dos caras delante de un combinado ruso extremadamente disciplinado en defensa y que no se rindió después del gol de falta de Dier. 

En la primera parte sólo le faltó el gol a Inglaterra. Lo hizo todo. Dominaba la posesión y ahogaba la línea defensiva rusa, que rehusaba una pelota detrás de la otra. Adam Lallana estaba muy enchufado al partido y tuvo las ocasiones más claras. Rozó el palo en dos ocasiones pero los ingleses no encontraban el camino del gol.

La selección inglesa apretaba el acelerador y dejaba muchos detalles de calidad, confirmando, por juego, su candidatura a la Eurocopa. Pero la segunda parte fue otra historia. Rusia salió más concentrada y tapó las principales vías de creación inglesa. Inglaterra veía cómo el tiempo corría y no podía hacer nada para intimidar una apuesta defensa rusa. 

El guion del partido lo cambió Dier. Una falta enganchada a la línea que marcaba la frontal del área supuso el primer gol del partido. El joven mediocampista fusiló el palo del portero de un Akinféyev que pudo hacer alguna cosa más. Era el minuto 74 e Inglaterra no sabía lo que se le vendía encima.

A la última jugada del partido, el capitán ruso Berezoutski hizo el empate en un remate de cabeza en el segundo palo. El defensa le ganó la partida a Rose i Alli para superar a Joe Hart por alto. Poco premio para una Inglaterra que pecó de no cerrar el partido a tiempo. 

Gales y Bale hacen historia

La selección galesa ha conseguido su primera victoria en una Eurocopa. Y lo ha hecho delante de Eslovaquia, gracias, en parte, a un gol de falta de Gareth Bale.

El futbolista del Real Madrid abrió la lata gracias a un lanzamiento de falta marca de la casa. La pelota superó al portero eslovaco Kozácik después de hacer un extraño al aire. Bale conseguía así, el primer gol de la selección de Gales en un Europeo.

Eslovaquia reaccionó con amor propio para poner el 1-1 e igualar fuerzas. Pero Gales volvió a justificar el porque se lo considera el taponamiento del torneo.

Con fútbol y ganas, los galeses se hicieron con el dominio del juego y las ocasiones. Inclinaron el campo y el gol fue la consecuencia inevitable de todo. Robson-Kanu le dio los tres puntos a una selección que empieza a soñar a las primeros de cambio.

Albania roza la gesta contra Suiza (0-1)

Era más que un partido. Albania y Suiza contaban con jugadores de nacionalidades entrelazadas y el máximo exponente era el caso de los hermanos Xahka. Granit Xhaka (Suiza) y Taulant Xhaka (Albania) hicieron historia al convertirse en los primeros hermanos que se enfrentan en un Europeo con selecciones diferentes.

El partido acabó con triunfo helvético gracias a la generosidad de los albaneses, que regalaron numerosas ocasiones de gol y acusaron la falta de experiencia en competiciones de estas características.

El primero y único gol de Suiza llegó a los cinco minutos de juego. Una desastrosa salida del portero Berisha en una falta lateral permitió Schar conectar un buen cabezazo para abrir el marcador.

A pesar de la generosidad de la defensa albanesa, los suizos no supieron matar el partido. Además, Albania vio como en el minuto 37 se quedaba sin su capitán Loick Cana, expulsado de manera justa por doble tarjeta amarilla. 

A raíz de la roja, Albania juntó líneas y le creó muchos problemas en Suiza, que pudo sumar los primeros puntos del torneo gracias a Yann Sommer, portero del combinado entrenado por Vladimir Petković.