Sergio Rodríguez y Ricky Rubio han liderado una gran victoria de la selección española de baloncesto contra Croacia (73-79). En los últimos minutos ha aparecido el equipo más unido y la puntería que se ha echado de menos en varios compases del partido.

La mala puesta en escena del combinado español ha sorprendido a todo el mundo, anotando un solo punto en los primeros cinco minutos. La eficacia en ataque no era la adecuada y la defensa no conseguía engranar en la frecuencia esperada para rendir de acuerdo con lo mostrado en los partidos anteriores.

Cuando el equipo ha empezado a funcionar detrás toda la maquinaria ha recuperado el nivel. Antes de un caótico final después de que el partido se calentara, el buen trabajo de Joan Sastre y la energía de Juancho Hernangómez han sido lo mejor del combinado dirigido por Sergio Scariolo. Mientras tanto Pau y Marc Gasol han dominado los rebotes defensivos.

La permisividad arbitral ha hecho que la dureza defensiva se impusiera sobre los ataques. La alternancia en el marcador se ha convertido en una constante y las malas decisiones de los árbitros han puesto en duda un partido que ha sido extraño para los dos equipos.

Y todo hasta que ha aparecido la seguridad de Sergio Rodríguez y Ricky Rubio, que han acabado de sentenciar el partido más complicado de esta primera fase de grupos. Con la victoria la selección española se ha asegurado la primera posición de grupo y la mejor clasificación posible para los octavos de final. El próximo jueves acaba la primera fase con un partido de trámite contra Hungría.