Andreas Christensen seguirá siendo jugador del FC Barcelona la próxima temporada. El central danés ha tomado una decisión firme: no se moverá del club pese a los rumores de las últimas semanas y a las ofertas que ha recibido desde otras ligas, como la de Arabia Saudí, donde el Al-Nassr intentó convencerle con una propuesta económica muy por encima de lo que percibe actualmente en el Camp Nou. Sin embargo, su compromiso con el Barça ha pesado más que el dinero.
Christensen, que tiene contrato en vigor hasta 2026, no tiene ninguna intención de abandonar Barcelona, ciudad en la que tanto él como su familia se sienten plenamente integrados. A pesar de que el club no le ha ofrecido aún una renovación y de los movimientos en la defensa que podrían haberle desplazado del foco, el jugador seguirá defendiendo los colores azulgranas y lo hará con ambición renovada.
Aval de Flick y un rol versátil
Hansi Flick cuenta con él. El técnico alemán, que ya ha comenzado a perfilar su plantilla para la próxima campaña, valora mucho la polivalencia de Christensen, especialmente en una plantilla donde la competencia en la zaga será intensa. El técnico ha transmitido a la directiva y al cuerpo técnico que ve al danés como una pieza útil y versátil, capaz de rendir tanto como central como en otras posiciones si la situación lo requiere.
De hecho, una de las posibilidades que se barajan es utilizar a Christensen como pivote defensivo, sobre todo ante el exceso de centrales disponibles y la necesidad de variantes tácticas en el centro del campo. Flick considera que su capacidad táctica, su posicionamiento y su experiencia pueden ser valiosas en ese rol.
Un reto deportivo por delante
La competencia será feroz. Con Pau Cubarsí e Iñigo Martínez como pareja titular, y Ronald Araujo como tercer central, Christensen tendrá que pelear por minutos, especialmente si Eric Garcia también permanece en la plantilla. Sin embargo, el danés no rehúye el reto. Tras una temporada marcada por las lesiones, en la que solo pudo disputar 259 minutos repartidos en cinco encuentros, quiere recuperar su mejor versión y demostrar que sigue siendo un central de primer nivel.
Christensen está plenamente enfocado en su recuperación y en llegar al máximo para la pretemporada. Su objetivo es claro: reivindicarse dentro del campo y ganarse un lugar en los planes de Flick, sea en defensa o en otra posición.
La decisión está tomada. Andreas Christensen no se mueve del Barça, y Flick ya tiene en mente cómo aprovechar todo su potencial en un año que promete ser clave para el futuro inmediato del equipo.